Especialistas prevén que el agotamiento, ansiedad y depresión es la nueva pandemia provocada por el COVID-19.
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Ivette Mucharraz, profesora de la Dirección de Personal IPADE, comentó: “Estamos observando muchas cosas, por ejemplo, incremento en los índices de suicidio, incremento en enfermedades cardiovasculares, la gente se empieza a enfermar mucho, la depresión, la ansiedad y lo que también sabemos es que hay una etapa en la que se desarrolla estrés postraumático”.
Alejandro Molina, asistente de la Dirección General en Servicios de Atención Psiquiátrica SSA y miembro del Sistema Nacional de Investigadores, explicó: “Se está acercando una ola de trastornos mentales aún más que la que ya se ha presentado, en general, se puede ver cualquier tipo de trastorno mental, de acuerdo a la vulnerabilidad que cada persona tenga ante alguna cierta dosis de estrés”.
Los especialistas recomiendan:
- No apartarse de rutinas.
- Tener higiene del sueño.
- Hacer ejercicio.
- Cuidar la alimentación.
Dichos problemas emocionales han afectado a familias que tuvieron COVID-19 hace unos meses, que lo superaron, pero las secuelas de la enfermedad y del encierro se están sintiendo.
Charlotte Sosa, madre de familia y emprendedora, señaló: “Antes teníamos como horarios estipulados, ahora ya ni para ser mamá, ni para trabajar ni nada. Empiezas y no tienes hora de fin, justamente porque no separas la oficina de casa”.
Ivette Mucharraz, profesora de la Dirección de Personal IPADE, dijo: “Hoy claramente podemos ver las señales de que estamos enfrentando una nueva pandemia o epidemia con respecto a la salud mental y eso, sin duda, está reflejándose en el tema del ‘burn out’, o este agotamiento excesivo, también así se le llama en español, lo estamos observando, primero, en los estudios que vienen del extranjero, ahora sabemos que hay tres elementos cuando existe este agotamiento emocional. Uno de ellos, el cansancio físico; la baja realización personal, la persona ya no siente el mismo entusiasmo para hacer su trabajo, y, la tercera, la despersonalización, finalmente también afecta la productividad”.
Aseguran que uno de los grupos más vulnerables frente a la pandemia son las mujeres.
Están optando por dejar sus trabajos formales e incorporarse a la informalidad, porque no hay quien cuide a sus hijos por las clases en línea o las clases híbridas.
El Informe McKinsey hecho en Estados Unidos refleja que 1 de cada 4 mujeres ha pensado en dejar su profesión o reducir el número de horas que trabajan.
Con información de Susana López/Noticieros Televisa
LSH
