SALUD

Agencia Europea no ve vínculos de vacuna COVID-19 de AstraZeneca con trombosis

Afirma la EMA que no dudará en tomar medidas si los expertos detectan en su investigación algún problema ‘que no pueda resolverse’

La Agencia Europea del Medicamento (EMA) no aprecia este martes “vínculos” de la vacuna de AstraZeneca con la aparición de algunos casos de trombosis y embolias y sigue “firmemente convencida” de que sus “beneficios” en combatir la COVID-19 superan “los riesgos”, según su directora, Emer Cooke.

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Cooke subrayó, en una intervención telemática, que no se dudará en tomar medidas si los expertos detectan en su investigación algún problema “que no pueda resolverse”, aunque, de momento, no se ha encontrado “evidencia” que sugiera que este fármaco cause directamente problemas de coagulación sanguínea en los pacientes vacunados.

Pidió esperar a una “evaluación completa” para descartar completamente que haya alguna relación entre algún lote de dosis producidas por AstraZeneca, un escenario que los expertos del comité de seguridad (PRAC) están investigando desde que Austria dio la voz de la alarma la semana pasada, retirando un lote específico de estas vacunas, el ABV5300, que contenía en total un millón de dosis distribuidas entre 17 países miembros.

Pero, de momento, tampoco cree que haya problemas específicos con ese lote porque hay personas que presentaron eventos tromboembólicos tras recibir dosis de otros paquetes.

“Tenemos que estudiar primero todos los hechos a fondo científicamente, se lo debemos a los ciudadanos europeos”, agregó Cooke, quien subrayó que, si los expertos creen “que hay un problema que no pueda resolverse” con esta vacuna, tampoco dudarán en “tomar los pasos necesarios” o en añadir al prospecto de AstraZeneca una advertencia concreta.

Varios países europeos, incluidas Alemania, España, Francia e Italia, tomaron estos días la precaución de suspender el uso de esta vacuna en sus campañas de forma temporal, a la espera de que la EMA concluya su investigación científica sobre la existencia de un vínculo causal con los casos de trombos y embolias reportados por diferentes autoridades, o si estos eventos son “una coincidencia”.

Cada año, se detectan miles de casos de desarrollo de coágulos de sangre entre los ciudadanos europeos por diferentes razones médicas, y, desde que empezó la vacunación en la Unión Europea a finales de diciembre, el número de eventos tromboembólicos en las personas vacunadas no parece ser mayor que el observado en la población general, según Cooke.

Además, durante los ensayos clínicos llevados a cabo por AstraZeneca antes de lograr la licencia de uso condicional en la UE a finales de enero, no fueron detectados casos de tromboembolismo posteriores a la vacunación, por lo que esta condición no se recoge como posible efecto secundario de la vacuna, que suele provocar dolor de cabeza o muscular, molestias en la zona del pinchazo, fatiga o fiebre, entre otros síntomas leves o moderados.

“Si se vacuna a millones de personas, es inevitable que se presenten casos incidentales y se destaquen. Depende de nosotros investigar si esto está realmente relacionado con la vacuna o si hay otras causas”, añadió Cooke, quien hizo hincapié en que las complicaciones reportadas se han dado solo en “un número muy reducido de personas”, aunque rechazó detallar la cifra exacta de vacunados que informaron de problemas de coagulación en la UE.

El PRAC espera poder anunciar sus conclusiones científicas sobre estos eventos el próximo jueves, cuando acabe su investigación de los casos reportados a la EMA, también por el Reino Unido.

De momento, Cooke subrayó que no ven señales que sean “motivo de preocupación” como para recomendar firmemente la suspensión del uso de esta vacuna en la UE, y reconoció “preocupación de que haya un efecto en la confianza en las vacunas” tras la suspensión del uso de AstraZeneca en varios países europeos.

Mientras la vacunación con AstraZeneca está paralizada en muchos países a la espera de la investigación de la EMA, la Comisión Europea anunció hoy que ha llegado a un acuerdo con el laboratorio de BioNTech-Pfizer para que adelanten al segundo trimestre la entrega de 10 millones de dosis de su vacuna, inicialmente parte de las previstas para el tercer y cuarto trimestre de 2021, con vistas a acelerar la campaña de vacunación antes del verano.

La Comisión tiene planeado presentar mañana su propuesta para crear un pasaporte de vacunación que certifique que su portador está inmunizado o ha dado negativo en un test PCR, una medida que busca facilitar los viajes en la UE, pero que genera dudas por su posible carácter discriminatorio hacia las personas no vacunadas.

Esta idea recibió este martes el rechazo de la directora del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC), Andrea Ammon, quien consideró que “crear ciertas libertades en conexión con (la vacunación) supone un trato desigual”, dado que, por ahora, la gran mayoría de ciudadanos no ha tenido la opción de vacunarse.

Con información de EFE

AAE