Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2030 en México habrá más personas mayores de 60 años, que niños y jóvenes menores de 15.
Don Rafu es uno de los más de 10 millones de adultos mayores de 60 años que hay en el país y que representan el 9% de la población mexicana.
Pese a que este lunes 28 de agosto podría ser un día feliz para Rafu, la realidad es que el Día del Abuelo no le da motivos para festejar.
Está solo en un parque del Centro Histórico. Sentado en una banca, ve pasar el día.
“Dicen, no sé si sea cierto porque eso no lo llevo yo a la práctica, que se quiere más a un nieto que a los hijos, eso no lo he tenido en mi interior”, indicó don Rafu Armenta Castro.
A sus 79 años de edad, es abuelo de 4 nietos, y aunque asegura tener una buena relación con ellos, no los ve frecuentemente.
“Mis nietos no están chavalos, el más pequeño tiene 19 años y el más grande 32. Unos ya son casados, de mis nietos dos, y una de mis nietas que ya se va a casar”, dijo don Rafu.
Dice que no quiere ser una carga para sus nietos, y por eso él mismo se ha alejado de ellos.
En su banca de la plaza “Carlos Pacheco”, también conocido como “Jardín San Pablo”, don Rafu considera que a sus hijos les dio sus mejores años y ahora, a él, sólo le toca aconsejar, y si es necesario, corregir a sus nietos.
Dijo que proteger, pero no sobreproteger, es su papel en la familia.
“Siempre debe de haber un alto, un ‘ya estuvo’, o también tener un diálogo, un monólogo para con ellos para saber cuáles son sus inquietudes; cuál es el objetivo que tienen”.
Para don Rafu, el mejor regalo que puede tener hoy es saber que se encuentran bien.
Con información de Farah Reachi.
LLH
