Los resultados de las pruebas de ADN practicadas a dos bebés, presuntamente intercambiados en el área de incubadoras de un hospital de Sonora, revelan que los menores sí fueron entregados a sus verdaderos padres.
Ángel Roberto, padre de uno de los recién nacidos, dijo que todo salió bien, en el resultado “salió que ese que nos dieron sí era el de nosotros”.
Los sobres con los resultados de las pruebas de ADN fueron abiertos por las autoridades de Salud y del Hospital Infantil de Sonora, en presencia de los padres de los bebés.
Se confirmó que, aunque los niños fueron colocados en incubadoras que no les correspondían, al ingresar a Neonatología, el pasado 30 de diciembre, finalmente se hizo la corrección y los pequeños fueron devueltos a sus padres.
Rocío Barraza León, directora del Hospital Infantil del Estado de Sonora (HIES), señaló que “jamás hubo un error de identificación de los bebés, el error que se cometió aquí fue la ubicación de las incubadoras”.
Las autoridades del Hospital Infantil reconocieron que hubo un error de enfermeros y aseguraron que revisaron los protocolos de seguridad, para garantizar que esto no se repita.
El señor Ángel Roberto indicó que “se dieron cuanta a tiempo”, de no ser así, “nos hubiéramos llevado a otro bebé que no es el de nosotros”.
Con información de Joaquín Fuentes.
RMT
