POLíTICA

Activistas increpan en México al juez que destapó sobornos en Petrobras

El juez Sergio Moro, cabeza de la mayor operación judicial contra lavado de dinero y corrupción de Brasil, estuvo en México. Habló sobre los retos para combatir la impunidad.

“El proceso judicial tiene sus limitaciones, es una condición necesaria para superar la corrupción sistemática, pero se necesita más que eso, se necesita voluntad política general para que un país adopte y apruebe reformas que disminuyan oportunidades de corrupción”, mencionó el juez federal de Brasil, Sergio Moro.

Moro participó en el ciclo de conferencias: Los problemas nacionales y el derecho: la corrupción, en la sede del Colegio Nacional. Dijo que la aplicación de la ley no debe de tener fronteras.

Los países se tienen que unir para enfrentar causas comunes y una de ellas es enfrentar la corrupción que afecta la productividad de la economía, la calidad de una democracia e incluso el buen desarrollo de las relaciones entre esos países”, destacó el juez federal de Brasil, Sergio Moro.

Agregó que la independencia, la cooperación jurídica internacional y el apoyo de la opinión pública son fundamentales para garantizar el éxito de una acción jurídica.

En los procesos que involucran personas poderosas ya sea económica o políticamente siempre existe el riesgo de obstrucción de la justicia y desde mi punto de vista, en este caso de la “Operación Lava Jato”, fue importante que la opinión pública previniera esta obstaculización, dijo el juez federal de Brasil, Sergio Moro.

Un grupo de manifestantes protestan durante la conferencia “El combate a la corrupción desde el Poder Judicial: Caso Brasil”, en la Ciudad de México (EFE)

La investigación encabezada por Moro divide opiniones en Brasil, en particular, en un año en que se elige presidente.

“La práctica de estos crímenes… ¡Mentira! ¡Mentira! ¡Mentira! Por otro lado. ¿Qué pasa? Moro inmoral, juez parcial…Moro inmoral, juez parcial”, gritaron integrantes del colectivo México-Brasil contra el juez Sergio Moro.

Afirmaron que la investigación contra Lula da Silva es parte de una persecución política. El ex presidente enfrenta una condena de 12 años y un mes de prisión por corrupción y lavado de dinero.

Además, tiene otros seis procesos judiciales en su contra y dos investigaciones por lavado de dinero y obstrucción a la justicia.

Aun así, presentó su candidatura para la presidencia, por tercera vez, con el riesgo de ser detenido en cualquier momento.

Una elección sin Lula es fraude, están haciendo esto para quitar al candidato que seguramente ganaría la elección”, denunció Miriam Madureira, profesora e integrante del Colectivo México-Brasil contra el golpe.

La investigación Lava Jato, a cargo del Juez Sergio Moro, cimbró la cúpula política y empresarial de Brasil al destapar la práctica sistemática de sobornos en la petrolera estatal Petrobras y salpicar a las figuras más representantes de la política brasileña.

Se han dictado 118 sentencias por corrupción y lavado de dinero. Lava Jato también desató otro escándalo que alcanzó a gobiernos de doce países en tres continentes: la red de sobornos de la mayor constructora de América Latina, Odebrecht.

Con información de Ana María Islas

HVI