La Iglesia católica de Chile respaldó este viernes la inviolabilidad del secreto de confesión sustentado en “las leyes del Estado chileno que garantizan la libertad religiosa” pese a que pueda suponer el conocimiento de nuevos casos de abusos sexuales en el seno clerical.
El sigilo sacramental es inviolable como inviolable es la conciencia de quienes acuden a confesar sus pecados para arrepentidos disponerse a repararlos asistidos por la gracia de Dios que nos ofrece su perdón”, afirmó el secretario general de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh), el obispo Fernando Ramos.
El respaldo de la Iglesia a mantener en secreto este sacramento se produjo hoy al término de la 118 asamblea plenaria de la CECh que reunió a los obispos y administradores apostólicos de las distintas diócesis de Chile durante cinco días en la localidad costera de Punta de Tralca.
El fiscal nacional de Chile, Jorge Abbott, informó que ascendieron a 166 las causas abiertas contra personas relacionadas con la Iglesia católica chilena por la presunta comisión de abusos sexuales en el seno clerical, según la actualización del catastro de la Fiscalía Nacional.
Este último recuento del Ministerio Público aumenta también el número de personas investigadas, que ascendieron a 131; un incrementó que también se registró en cuanto a la cantidad de víctimas que sufrieron estos abusos y que actualmente suman 221 personas.
Entre estos afectados, hay 131 víctimas que eran menores de edad en el momento en el que ocurrieron los hechos.
Con respecto a los investigados, las estadísticas contabilizan a 10 obispos, 152 sacerdotes, 9 diáconos, 15 laicos, 8 personas de las que no se dispone información y 27 pertenecientes a órdenes o congregaciones sin ser clérigos, informó la Fiscalía Nacional.
Desde la última actualización de datos de este catastro, el pasado 22 de marzo, se han sumado 8 nuevos casos, 2 nuevos investigados y 7 nuevas víctimas.
Con información de EFE
MLV
