De acuerdo con las autoridades, de forma simultánea, entre 75 y 85 gasolineras de las 366 de Ciudad de México no están surtiendo gasolina. No son las mismas, unas abren, otras se quedan sin gasolina, pero la cifra se mantiene en un promedio de 80 gasolineras cerradas simultáneamente, lo que presiona la operación de las otras 280.
La llegada de pipas ha sido constante pero no suficiente y no se detectan problemas de abasto de productos.
La ciudad lució vacía, mucha gente optó por utilizar otras formas de transporte.
Nos comunicaron que sí iba a llegar la pipa de gasolina, entonces decidimos esperar”, dijo Román Rosales, taxista.
Varias estaciones de servicio se abastecieron de combustible esta madrugada, pero fue insuficiente.
Este jueves hubo más filas de vehículos en los alrededores de las estaciones de servicio.
Es mediodía y todavía no podemos cargar, al fin de cuentas uno es taxista y va al día, llevo 12 horas para 300, 400 pesos que le voy a echar”, comentó Julio César Cortés, otro taxista.
“En esta estación si hay diésel, pero no hay magna, tampoco premium, los autos sólo están esperando a cargar, pero no hay, están estacionados esperando a que llegue una pipa, pero no tenemos hora, ni día”, dijo Raúl, empleado de gasolinera en Iztapalapa.
Tomás pasó más de 12 horas haciendo fila en la gasolinera que se ubica sobre canal río Churubusco.
Los camiones de los proveedores y los transportistas de alimentos y productos perecederos, también resultaron afectados.
Yo hago fletes en la central de abasto, me va mal porque aquí estoy desde las cuatro de la mañana no he podido trabajar, es un día perdido”, comentó Gerónimo Torres, fletero.
Vehículos oficiales y de emergencia también comenzaron a padecer la falta de combustible.
Ahorita llevamos desde la mañana, son casi la una de la tarde y las unidades todavía no llegan de donde fueron a abastecer, si llega haber una conflagración, un incendio fuerte no sabemos si nos pueda afectar porque ahí el consumo es mayor”, afirmó Ernesto Pichardo Luna, jefe de la Estación de Bomberos de Ciudad de México.
Algunas personas decidieron dejar el auto en casa y usar transporte público, esto hizo que el servicio del Metrobús aumentara en un cinco por ciento de miércoles a jueves.
En el caso del Metro, hasta el miércoles la afluencia era la normal para una semana de reanudación de actividades luego de las vacaciones de diciembre.
La facturación del servicio de transporte Uber se mantuvo dentro de los parámetros normales y solo advirtieron que había menos unidades en servicio.
A otros automovilistas, el temor de quedarse sin gasolina los hizo perseguir las pipas con combustible.
La seguí desde Taxqueña, la vengo siguiendo, hace como cuatro horas que estábamos formados en Taxqueña”, aseguró Raúl Reyes, automovilista afectado.
Con información de Elizabeth Mávil
LHE
