CIUDAD ACUÑA, México, mayo 26, 2015.- El fenómeno meteorológico que devastó varias colonias de la zona sur-poniente de Ciudad Acuña, Coahuila, sorprendió a cientos de familias que aún dormían la madrugada del lunes.
La lluvia y el viento habían empezado momentos antes y fueron aumentando su fuerza hasta convertirse en un tornado que avanzó sobre las viviendas y empezó a destruir todo lo que estaba a su paso.
Muchas casas fueron devastadas. En una de ellas dormían la señora Mayra Alejandra Morales, de 28 años, con sus dos hijos, Melanie de cinco años y Jonathan de dos, en el Fraccionamiento Santa Rosa, una de las colonias más destrozada por el meteoro.
Fue una de las más de 800 viviendas que fueron arrasadas por la fuerza del tornado.
En la recámara donde dormían quedaron los colchones, el techo y las paredes se vinieron abajo. Los tres murieron al caer el techo de la vivienda.
“Pues se le cayó su techo y se fue con sus dos hijos y pues, yo creo que no alcanzó a pedir auxilio”, comentó María del Refugio Renteria, vecina de Alejandra.
Mayra Alejandra y sus dos pequeños son 3 de las 13 personas fallecidas que dejó el tornado a su paso con vientos de casi 300 kilómetros por hora y que en 6 segundos arrasó cuatro colonias.
Ahora unas 4 mil personas de Ciudad Acuña, Coahuila, no tienen donde dormir. La mayoría pasó la noche frente a sus casas para cuidar lo poco que les dejó el tornado.
“Pues levantó todo el techo, esa era la cocina, no quedó techo de nada, esa era una recámara que ampliamos, con mucho esfuerzo pero lo hicimos, no quedó tampoco nada, el baño lo ampliamos no quedó nada, esto era el comedor, esa era mi sala”, comentó Griselda Ríos, una de las afectadas.
Este martes, apoyados por elementos del Ejército Mexicano, Protección Civil y de otras instituciones estatales y municipales, iniciaron con el retiro de escombros.
Hoy los damnificados recibieron raciones de alimentos y se instalaron comedores comunitarios.
En la zona del desastre no hubo clases. El servicio del agua potable se restableció al 100% y la energía eléctrica en un 60 por ciento.
MACO