Las verrugas genitales, síntomas del VPH, son muy comunes y suelen aparecer como un “aviso” de la presencia de este virus en el cuerpo.

¿Cómo es su apariencia?

Las verrugas son pequeñas protuberancias de color carne y tienen una apariencia de coliflor, es decir, no son lisas. Por lo general son muy pequeñas, razón por la que notarlas puede llegar a ser algo complicado mas no imposible.

¿Dónde aparecen?

Depende de cómo se haya dado el contagio. Si la relación fue vaginal y ahí se transmitió el virus, brotan alrededor de esta zona. En los hombres, aparecen en el pene (por lo general en el glande). En dado caso de que se haya transmitido vía oral, pueden aparecer en la lengua o en la parte trasera de la garganta, lo que hace aún más difícil su detección. Si el contacto fue vía anal, también afecta el tejido húmedo de esta zona. Por su ubicación, también puede llegar a ser difícil su apreciación. ¿Provocan malestar? Sí. Esta pequeña hinchazón de color carne o rosa, puede generar comezón y malestar en el área donde ha aparecido así como sangrado en las relaciones sexuales. La aparición de las verrugas por VPH puede ser muy simple, al grado de que son casi invisibles o por lo contrario, propagarse al multiplicarse en grupos grandes. Todo depende del sistema inmunitario de cada persona. Recuerda que, el hecho de que las verrugas no sean visibles, no disminuye o elimina el riesgo de contagio a otra persona así que, cuídate con los métodos de barrera correspondientes y acude a chequeos médicos generales cada determinado tiempo.