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CRIMEN Y SEGURIDAD

Venezolana “cazaba” hombres en redes para robarles, enterró vivo a uno

"Me gustan los maduritos", decía en sus mensajes

Bajo el nombre de ‘Dulce Ángel’, una mujer venezolana contactaba a hombres a través de las redes sociales, prometiéndoles encuentros sexuales. Una vez que iban al lugar que habían acordado, los secuestraba y los golpeaba brutalmente para robarles.

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Hedangelin Candy Arrieta de 34 años tenía como cómplice a su pareja, Mohamed Achraf de 35 años, quien tiene antecedentes de haber maltratado a su anterior mujer. Los ataques se llevaban a cabo en Pedrola, Zaragoza (España).

Desde octubre de 2019 la pareja se encuentra en prisión, se les adjudican tres casos. El más reciente fue el de José Antonio Delgado, un informático de 54 años, a quien golpearon hasta dejarlo inconsciente.

Arrieta y Achraf le robaron aproximadamente 1,500 euros y un Mercedes de alta gama que vendieron por 10,000 euros en internet. Mientras que a Delgado lo enterraron vivo en un paraje apartado de Pedrola.

Después de una árdua investigación, la Guardia Civil, junto con agentes de la Unidad Central Operativa, la Comandancia de Zaragoza y la Ertzaintza, hallaron el cadáver de Delgado el 27 de septiembre.

Muy cerca de donde fue localizado el cuerpo estaba la “base de operaciones” de la pareja, donde tenían su botín: coches, joyas y dinero que consiguieron arrebatar a los hombres que caían en sus engaños.

¿Cómo los “enganchaba”?

La mujer seleccionaba a los hombres y era ella quien iniciaba la conversación a través de la red social Badoo.

Asimismo, publicaba varias fotos de cuerpo entero y con poca ropa.

“Ella tomaba la iniciativa, elegía a una víctima en Badoo sin buscar un perfil concreto, solo buscaba que el hombre aparentara tener un alto poder adquisitivo. En realidad no quería un ligue ni un novio, sino una presa fácil. Siempre era ella quien contactaba con las víctimas y no al revés”, de acuerdo con una fuente cercana al caso, consultada por El Periódico.

Su primera víctima fue un rumano treintañero al que solo le pudo robar 50 euros, Además, se quedaron con su coche, un Renault Clío, que acabaron vendiendo por partes en internet. A partir de entonces decidió seleccionar “mejores víctimas”.

La segunda víctima es un empresario divorciado de 58 años, originario de Tudela, Navarra. Achraf y Arrieta le quitaron mil euros. En un principio ella le escribió: “Me gustan maduritos”.

El 4 de septiembre el hombre se encontró con Candy Arrieta en una estación de tren a diez minutos de Pedrola. Supuestamente iba a esperar a que llegara una amiga de ella para luego consumar su encuentro en un hotel. Sin embargo llegó Mohamed Achraf, quien golpeó al empresario con una llave inglesa.

“Me ataron de pies y manos, me metieron en un cajón dentro del maletero de un coche y el vehículo se puso en marcha por un camino. Después pararon el coche, pusieron música a volumen alto y abrieron el maletero. Entonces me pidieron el código pin de mi tarjeta de crédito”, delcaró el hombre a los investigadores del caso.

Además, la pareja lo amenazó con cortarle un dedo si no llamaba a su familia para pedirles 3 mil euros.

Mientras que a la tercera víctima la asesinaron brutalmente. Se cree que Arrieta también tuvo “un papel activo” en la violencia de este caso.

En las redes sociales de Hedangelin Candy Arrieta se lee un antiguo mensaje dirigido al entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez.

“Hola, mi presidente. Por favor, necesito una vivienda, tengo cuatro hijos. Respóndeme, soy chavista de corazón”.

La detención

Elementos de la Guardia Civil acudieron al domicilio de Candy Arrieta en Pedrola, ella dijo necesitar ir al baño; a su salida, una agente revisó la caja de escusado y encontró una cadena y un aro de oro.

Además, hallaron un “palo de golf, con pegatinas blancas y verdes”, pertenecientes al informático.

Los elementos de la Guardia Civil no consiguieron recuperar el dinero robado, sin embargo sí hallaron suficientes elementos de prueba que vinculan a Arrieta, a su pareja y a un tercer cómplice originario de Barcelona con los tres casos. Entre ellos, una pistola táser que utilizaron para torturar a una de las víctimas.

Vía El Periódico