La UNAM decidió hacer un gesto de divulgación, apertura y promoción de la cultura al liberar, en medio de la contingencia sanitaria, cientos de recursos bibliográficos y hemerográficos de su acervo especializado. A través de la Biblioteca Nacional de México, de la Hemeroteca Nacional de México y del Instituto de Investigaciones Bibliográficas (IIB), la máxima casa de estudios permite que todo mundo busque libros, revistas y periódicos en un enorme archivo abierto.
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¿Qué puedo consultar en estos catálogos?
Primero que nada, la Biblioteca Nacional de México (que se encuentra en el Centro Cultural Universitario, a un costado de la Sala Nezahualcóyotl) liberó el acceso remoto para que puedas leer cerca de 6 mil títulos que forman parte de los Impresos Novohispanos, la Colección Lafragua, la Colección de la Escuela Nacional Preparatoria, los Manuscritos, el Fondo de Origen, la Iconoteca y el Archivo de Francisco I. Madero, entre otras colecciones.
La UNAM liberó también el acceso a su histórico acervo de periódicos, revistas e imágenes que se encuentran en la Hemeroteca Nacional Digital de México. En este amplísimo catálogo que cuenta la historia de las publicaciones periodísticas en México, pueden buscar recursos por año, por lugar geográfico, por título o por palabras. Esta plataforma es una de las más importantes en la UNAM y, el año pasado, ganó el Reconocimiento Universitario de Ingeniería de Software y Bases de Datos.
Además, está a disposición del público el Sistema de Índices Hemerográficos: un nuevo sistema de información que se alimenta todos los días por especialistas que analizan la prensa del siglo XX y XXI.
¿Quieren saber qué decían las portadas de periódicos el 3 de octubre de 1968? ¿Quieren leer las peleas de Salvador Novo con la intelectualidad mexicana? ¿Quieren revivir cómo fue la cobertura del temblor de 1957? Aquí pueden encontrar todo esto y mucho más.
Por si fuera poco, la Hemeroteca Nacional de México y la página del Instituto de Investigaciones bibliográficas digitales abrieron diferentes colecciones para todas las edades. Para los más pequeños y para los interesados en el campo, está la colección de historietas de la Hemeroteca: Pepines. La digitalización de las historietas se ha encontrado con varios problemas de derechos y con un proceso más largo de lo esperado. Sin embargo, hay muchas cosas interesantes que ya se pueden consultar ahí.
Por otra parte, pueden darse un clavado en el Sistema Bibliográfico de la Literatura Novohispana (SIBILA), una base de datos sobre la producción y recepción de la literatura durante el período virreinal mexicano (1521-1821). Aquí encontrarán descripciones bibliográficas de documentos impresos y manuscritos de literatura novohispana.
También, ya están en línea la base de datos con el catálogo digitalizado de 12 libros de coro antiquísimos resguardados por el fondo reservado de la Biblioteca Nacional de México. Un verdadero deleite de finísima manufactura artística e importancia histórica.
Por otra parte, la UNAM liberó la Colección José María Lafragua, un catálogo digital para leer las fichas técnicas y el resumen de los documentos que se encuentran en la Colección
Lafragua de la Biblioteca Nacional de México.
También, encontrarán un enorme catálogo digital de todas las publicaciones vinculadas con la historia del arte, la ingeniería, la arquitectura y el urbanismo mexicano del siglo XX y XXI en las Fuentes para el Estudio del Patrimonio Construido en México.
Finalmente, se renovó también un compendio enciclopédico náhuatl digital en el que podrán consultar fuentes documentales escritas en glifos y en alfabeto. En este acervo hay un diccionario Náhuatl; el corpus Tlachia de códices que conforman un diccionario en glifos de escritura náhuatl; la colección Temoa de textos alfabéticos en náhuatl; y el analizador morfológico de náhuatl, Chachalaca.
Finalmente, en el Facebook del Instituto de Investigaciones Bibliográficas de la UNAM, la máxima casa de estudios ha estado subiendo lecturas de investigadores para que el público pueda escucharlos leyendo sus cuentos favoritos. Actualmente, Sergio Hernández Roura y Francisco Mercado compartieron, respectivamente, “El rey peste”, de Edgar Alan Poe, y “La partida”, de Alberto Chimal.
También, el 23 de abril, para celebrar el Día Mundial del Libro, la Biblioteca Nacional del Libro va a lanzar una nueva iniciativa para hacer más lecturas en voz alta de libros de literatura infantil mexicana para niños. Este proyecto, organizado bajo el hashtag #LecturadePrimavera busca incitar a los más pequeños a que lean más y se interesen por la literatura.
Así lo explicó Gisel Cosío Colina del Departamento de Difusión Cultural del Instituto de Investigaciones Bibliográficas.
“La lectura es un buen aliciente y compañía en medio de la contingencia sanitaria, por lo que la Universidad se suma a la estrategia ‘Viralicemos la lectura’, impulsada por la Dirección General de Bibliotecas, del gobierno federal. Sirva este esfuerzo como una pequeña contribución, pues la literatura es siempre una buena compañía.”
