La Sociedad Zoológica de Londres advirtió que la tortuga Elusor Macrurus, que se distingue por tener “pelo verde” y respirar por los genitales, se encuentra en peligro inminente de extinguirse.
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El reptil, endémico del río Mary, al sudeste de Queensland, en Australia, es posiblemente una de las criaturas más llamativas del planeta, pero también una de las más amenazadas.
A pesar de contar con excelentes instintos de supervivencia, este reptil, que se distingue por tener órganos similares a branquias dentro de un orificio utilizado para su excreción y apareamiento, llamado cloaca, no ha podido ocultarse de la caza indiscriminada por parte de los humanos.
Desde la década de los sesenta y setenta del siglo pasado, los humanos han capturado a los ejemplares de esta especie para venderlos como mascotas, lo que ha llevado a la tortuga “punk” a la lista de especies en peligro de extinción.
La tortuga de aproximadamente 40 centímetros de largo, tiene una llamativa cresta de color verde, colmillos carnosos debajo de su barbilla y respira a través de sus genitales, todas características que la hacen muy apreciada entre quienes la quieren de mascota.
Actualmente la tortuga ocupa el puesto 30 de la categoría de reptiles amenazados de la lista Evolutionarily Distinct and Globally Endangered (EDGE), que la Sociedad Zoológica de Londres, lleva actualizando desde 2007.
Por ahora, la especie que más peligro corre, según la sociedad, es la tortuga cabezona de Madagascar, seguida por la boa de la Isla Redonda, el camaleón de Madagascar y la tortuga de Ramsay o de nariz de cerdo.
De acuerdo a Rikki Gumbs, coordinador de la lista de reptiles de la sociedad, “los reptiles se llevan la peor parte en términos de conservación, en comparación con aves y mamíferos”.
Desde las tortugas marinas más grandes del mundo hasta una especie de serpiente ciega que se encuentra solo en Madagascar, la diversidad de los reptiles es impresionante”.
Ahora que la tortuga “punk” ha entrado en la lista, toca buscar los medios para asegurar su conservación.
Se calcula que hay al menos 100 especies de reptiles con mayor riesgo de desaparecer del planeta.
