Todos alguna vez nos hemos pasado de sal al cocinar. Sin embargo, hay trucos a los que podemos recurrir para solucionar este inconveniente.
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Uno de los incidentes más comunes al cocinar es que se nos pase la mano con la sal. Afortunadamente esto no tiene por qué ser una tragedia, ya que existen varios métodos para remediarlo.
Algunos de ellos son:
Usar un poco de almidón
La papa, por ejemplo, ayuda a absorber el exceso de sal de un platillo. El sabor salado también se puede contrarrestar con arroz.
Recurrir a ingredientes azucarados o ácidos.
Dichos sabores ayudan a ocultar lo salado de un plato. Para ello pueden agregarse al plato ingredientes ácidos, como tomate y limón; o dulces, como la miel o el azúcar.
Más líquido
Si la sopa te quedó salada, lo mejor es retirar un poco del líquido de este platillo y sustituirlo con agua natural.
Aumenta el volumen
Otra forma de contrarrestar el exceso de sal es añadir a la receta más ingredientes, agregando elementos como verduras o más carne. De esta forma se reducirá el porcentaje de sal y la preparación adquirirá otro sabor.
