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SALUD

¡No más clásicos! Dale un toque extra hot al sexo en la cama

El sexo en la cama puede que sea el más común, pero no por eso es aburrido ni mucho menos. En la cama podemos hacer de todo y para que lo compruebes, necesitas probar estas posiciones placenteras.

Pero no posiciones cualquiera, sino variaciones del estilo de perrito, el favorito de muchos y muchas, pues si estás atrás te permite una hermosa vista y si estás en 4, te deja el campo libre para poder estimularte solo o para que tu pareja lo haga.

Sexo en la cama, posiciones placenteras

El estilo de perrito es increíble porque también permite a la pareja que penetra profundizar más, lo que podría conducir a un orgasmo mixto para la parte inferior. Pero lo mejor de esta posición es su versatilidad. 

Si para darle un giro al sexo en la cama cambias a misionero o vaquera, ahora podrás probar una de estas variaciones de estilo perrito. Hay muchas posiciones placenteras a partir de hacerlo de perrito que puedes probar si eres alguien a quien le encanta dar o recibir sexo por detrás. Aquí te dejamos algunas y deseamos que las pruebes esta misma noche.

El hidrante

Comenzando de perrito, la persona que está en cuatro levanta una de sus piernas y la persona que está arriba desliza su pierna debajo de ella. Esta posición es excelente porque la parte superior puede tener más profundidad. 

En plancha

Esta es una posición sexual clásica para el sexo en la cama y ojalá que ya sea parte de tu repertorio sexual. Entre sus beneficios tenemos que permite una penetración súper profunda, y si a ti y a tu pareja les interesa el juego de control, la persona que esté arriba superior puede sujetar los brazos de la persona que está abajo.

De sapo

Esta posición placentera es similar al perrito, pero en esta versión en lugar de que uno de ustedes se ponga de rodillas, se pone como en cuclillas, con las plantas de los pies apoyadas firmemente en la cama. 

El pretzel

Quizá esta posición esté alejada del estilo perrito tradicional, pero sigue siendo una ganadora para esta práctica. Es una posición que permite una penetración profunda, pero también puedes agarrar fácilmente el trasero de tu pareja o jugar con su clítoris mientras la practican.