Muchas personas fantasean con tener relaciones sexuales en el parque, en la playa o en el baño de un avión, porque la sensación de hacer algo nuevo, incluso prohibido y desconocido mueve la común fantasía del sexo a escondidas.
Todo el mundo tiene fantasías sexuales y aunque a veces algunos sienten vergüenza de las cosas que los excitan y de sus pensamientos eróticos internos, sin importar cuál sea la fantasía, es completamente normal.
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Con esto en mente, queremos que sepas que las posibilidades a la hora de fantasear son infinitas, pero que se pueden englobar en siete categorías principales:
- Sexo con varias parejas
- Juegos de poder, control o sexo duro
- Novedad, aventura y variedad
- Fantasías no monógamas
- Tabú y sexo prohibido
- Pasión y romance
- Flexibilidad erótica
Así, el sexo a escondidas puede formar parte tanto del grupo de las fantasías de novedad, aventura y variedad, o del sexo prohibido o tabú.
Por su parte, las fantasías que se centran en la novedad incorporan una nueva actividad sexual, como anal u oral, o la aventura, tener sexo en una nueva ubicación, y son muy comunes.
Este tipo de fantasías provocan la sensación de enfrentarse a lo desconocido y probar algo por primera vez, por lo que pueden generar una descarga de adrenalina excitante y para algunas personas, con el sexo a escondidas, en un lugar público o intentando evadir a una persona, la excitación está relacionada con esa sensación de adrenalina.
Por otro lado, el sexo a escondidas también podría representar una fantasía tabú, o de sexo prohibido, pues cualquier relación o acto sexual que pueda meternos en problemas o ser visto como extraño, prohibido o asqueroso en la vida real, puede ser excitante.
Las fantasías sexuales son una parte normal de la vida. Algunas pueden excitarnos sólo como fantasía, mientras que otras pueden ser cosas que deseamos probar en la vida real.
Si con frecuencia tienes fantasías sexuales sobre cosas que no son legales y desea explorarlas de verdad, considera reunirte con un terapeuta sexual para desentrañar los impulsos. De lo contrario, respira hondo y habla con tu pareja. Lo más probable es que tengan una fantasía sexual o dos que también les gustaría probar en la vida real.
