Existen varios hábitos que, aunque en apariencia parecen inofensivos, pueden causar daño permanente en nuestros riñones.
Estas seis prácticas, habituales en nuestra vida cotidiana, podrían poner en riesgo nuestros riñones.
Tomar en exceso medicamentos contra el dolor
Los antiinflamatorios con ibuprofeno disminuyen el flujo sanguíneo hacia los riñones, provocando cicatrices que dañan a este órgano.
Muchos de estos medicamentos para el dolor crónico son de venta libre, por lo que el riesgo aumenta.
No beber suficiente agua
Aunque lo ideal es beber 8 vasos al día, es suficiente con tomar de 4 a 6. En contraste, ingerir uno o dos vasos diarios puede ser insuficiente para mantener limpio el organismo.
Además, un cuerpo deshidratado es más propenso a presentar presión arterial alta.
Tener presión alta
El doctor James Simon explicó a la revista Reader’s Digest que una presión arterial no tratada puede dañar los vasos sanguíneos que van a los riñones.
Los riñones son básicamente un gran conjunto de vasos sanguíneos con drenajes de orina”
… explicó.
Consumir alimentos procesados
La mayoría de estos alimentos tienen una dosis alta de sodio, el cual, además de dañar al corazón también trae problemas al riñón.
Abusar de los suplementos
Antes de consumir algún suplemento alimenticio lo ideal es acudir a un especialista, pues aunque algunos de ellos se comercializan como ‘naturales’, pueden contener sustancias dañinas.
Por ejemplo, el ácido aristolóquico que venden en ciertas tiendas naturistas pueden provocar cicatrices en el riñón.
Fumar
De acuerdo a un estudio realizado en 2012, si se deja de fumar por 16 años o más, el riesgo de presentar carcinoma de células renales (una de las formas más habituales de cáncer de riñón) se reduce hasta en un 40%.
Estos 6 hábitos deben evitarse en nuestro estilo de vida para preservar nuestra salud renal.
