Su nombre era Saman Kunan, un buzo que falleció tratando de transportar oxígeno para los 12 niños tailandeses y su entrenador atrapados en una cueva.
Tenía 38 años, era integrante de las fuerzas de élite de la Marina de Tailandia. Ofreció sus habilidades para el rescate de los menores atrapados en el complejo de cuevas de Tham Luang.
Saman Kunan fue en vida buzo rescatista. (Fuente: freemanpedia/Twitter)
Según quienes lo conocían, era un hombre desinteresado, dispuesto a ayudar los demás.
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Se quedó sin oxígeno mientras, transportaba oxígeno entre dos puntos de la red subterránea de cuevas, una actividad que tarda alrededor de 5 horas. Los intentos por reanimarlo resultaron infructuosos. El buzo falleció en la heroica labor.
Era “un hombre alegre que siempre hablaba en serio sobre su trabajo”, según uno de sus amigos.
Saman Kunan, reconocido como un gran hombre por sus amigos. (Fuente: MacWBishop/Twitter)
Deportista desde temprana edad; creció en Isan, una región muy pobre ubicada en el noroeste de Tailandia.
Funeral de Saman Kunan. (Fuente: BenarNews/Twitter)
Un monje budista encabeza la guardia de honor que lleva el féretro de Saman Kunan, de 38 años, un ex-miembro de élite de la Marina de Tailandia, quien murió mientras trabajaba ayudando a rescatar a los 12 niños y su entrenador de futbol atrapados dentro de una cueva inundada”, se lee en el tweet noticiero Benar News.
En la Marina aprendió a bucear, posteriormente se volvió rescatista.
Estaba casado, sin hijos.
Con información de Debate
