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POLíTICA

¿Qué le vende México a Corea del Norte?

El 7 de septiembre México expulsó a Kim Hyong-gil, embajador de Corea del Norte del país, y lo consideró persona non grata en protesta por la sexta prueba nuclear que el gobierno de Pionyang llevó a cabo unos días antes.

Desde entonces, las relaciones entre nuestro país y el régimen de Kim Jong-un se han visto dañadas, pero ¿exactamente qué lazos tiene México con Corea del Norte? Respuesta corta: el comercial.

El gobierno mexicano llevaba una relación diplomática cordial con el de Corea del Norte desde hace 37 años. Fue en 1993 cuando ese gobierno, entonces liderado por Kim Il-sung, abuelo de Jong-un, estableció su embajada en nuestro país.

Desde entonces las relaciones entre ambas naciones se han limitado a lo comercial, siendo el refinado de petróleo la principal exportación de nuestro país al de Kim Jong-un, llegando a representar el 99.2% de lo que México le vende a Corea del Norte.

Según cifras del Inegi, las ventas totales de productos mexicanos a este país asiático representan solo el 0.00016% de los 373 mil millones de dólares que México exportó en 2016. Aún así, para Corea del Norte, México es uno de sus socios comerciales más importantes, detrás de China.

Además de petróleo, en 2016 se vendieron teléfonos y computadoras hechas en México; transformadores eléctricos, centrifugadoras, hélices de barcos y componentes para máquinas de oficina, entre otras cosas.

También les vendimos varias toneladas de Zinc, alimentos para animales de campo, textiles y algunos plásticos y cauchos.

¿Y qué nos venden los norcoreanos?

Máquinas para la producción de hielo, trapos, franelas, polietileno, aprietatuercas, desatornilladores, monitores de rayos catódicos a colores y algunos aparatos de diagnóstico de ultrasonido. En total, los mexicanos compraron casi 6 millones de dólares en productos norcoreanos solo en el año pasado.

Con las recientes sanciones que el Consejo de Seguridad impuso sobre Corea del Norte por la prueba nuclear que organizó el 3 de septiembre, el país se queda con un solo aliado, el de siempre y el principal: China, país con el que desde hace años lleva poco más del 70% de sus importaciones.