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FAMILIA

Piden ayuda para don Goyo; adulto mayor que trabaja 12 horas en cañaveral veracruzano

Este señor de 94 años tiene que trabajar largas jornadas de tiempo para comer

La historia de don Goyo se viralizó en redes sociales después de que usuarios en Facebook compartiera las dificultades a las que este hombre de 94 años se enfrenta para poder obtener los ingresos mínimos que le permitan subsistir.

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Don Goyo, originario del municipio Ángel R. Cabada, Veracruz, trabaja hasta 12 horas diarias en los cañaverales para poder conseguir un poco de dinero.

Cuando su historia fue narrada por Karla Patricia Obil Mayoral, una usuaria que tomó una serie de fotografías a Don Gregorio y las publicó en su cuenta personal, otros cibernautas se dieron a la tarea de compartir que este hombre vive en una casa de láminas sin piso y que, desde muchos años, ha estado en soledad pese a tener hijos.

Su situación económica resulta compleja, ya que pese a sus dificultades para caminar y falta de calzado, debe trabajar largas jornadas en los cañaverales de Veracruz y después recorrer la ruta de regreso a su hogar.

Duerme en una vieja hamaca y el dinero que consigue tras su trabajo apenas le alcanza para poder comer, no cuenta con los recursos para protegerse del COVID-19 y por ello Obil Mayoral le regaló artículos de higiene personal y comida.

También se contó que don Goyo utiliza una caña como bastón y su andar en encorvado, “de lejos se veía el cansancio de los años” con el que anda y, pese a que tiene un perro llamado Chocolate y algunos pollitos, aún necesita ayuda para tener una vida digna en la cual su salud no corra riesgos.

“Toda ayuda es bien recibida, se necesita de todo un poquito. Si tienes croquetas para su perrito “Chocolate” y alimento para sus pollitos sería de gran ayuda”, escribió Karla Patricia en Facebook.

Dentro de esta publicación también se cita que, para los interesados que quieran ayudar a Don Goyo, podrán hacerlo enviando sus aportaciones a la Calle Miguel Hidalgo esquina Reforma por la tienda de Memo.

“Muchas gracias por la atención prestada. Dios los bendiga todos“, finalizó Obil Mayoral.