Luego de recibir una serie de solicitudes desde lo más profundo del Amazonas, el Papa Francisco podría autorizar que hombres casados sea sacerdotes católicos en algunas regiones de esta zona.
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Todo comenzó en la Amazonia, donde un grupo de feligreses llevaba la catequesis a las comunidades más alejadas de los centros conurbados.
Allí, se realizan ceremonias similares a las de la religión católica con los pobladores convertidos, pero al no contar con un sacerdote, éstas carecen de validez y de ritos como la eucaristía, la extremaunción y la confesión.
Por este motivo, las personas escribieron al Vaticano esperando que el Papa Francisco autorice a los diáconos del lugar como sacerdotes, aunque éstos no vivan en el celibato.
El próximo 6 de octubre será puesta a votación esta petición en un sínodo de tres semanas, donde se desea tenga prioridad el hecho de que las comunidades puedan tener la eucaristía, pese a que ello signifique cambiar los criterios para seleccionar y preparar a los ministros autorizados para celebrarla.
Desde México, el obispo emérito de San Cristóbal de las Casas, monseñor Felipe Arizmendi, dijo en una entrevista para Color abc que, en su opinión, eso puede ser válido para un lugar y no para toda la Iglesia, que puede haber excepciones como las ha habido a lo largo de la historia, pero que el Papa Francisco tendrá la última palabra.
Lo último dicho por Papa es que se podría considerar la posibilidad de una ordenación vivi probatoi, pero también se ha señalado que en el pasado, el sumo sacerdote mencionó que preferiría dar su vida antes de cambiar la regla del celibato.
Se plantea una solución para una situación muy concreta para una región donde no hay sacerdotes”.
Mencionó monseñor Arizmendi.
