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ACCIDENTES

Oso polar asesina a padre que protegía a sus hijos

Un hombre de 31 años murió en el inusual ataque de un oso polar en Nunavut, el territorio más al norte de Canadá, en donde la población de osos polares es común.

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Aaron Gibbons se encontraba en Sentry Island, un lugar popular para pesca y caza en la costa oeste de la bahía de Hudson, cuando se encontró con el oso.

La familia relató que Gibbons “murió como un héroe” cuando le decía a sus hijos que corrieran detrás de él mientras se imponía entre ellos y el oso para evitar el ataque.

Aunque sus hijos resultaron ilesos, Gibbons murió. Minutos después, un hombre disparó y mató al oso.

Gordy Kidlapik, tío de Gibbons explicó que el hombre “estaba disfrutando de un día con sus hijos (y) fueron sorprendidos por un oso que había comenzado a asechar a uno de los niños”.

Al momento del ataque, Gibbons se encontraba desarmado, según detalló la policía, aunque había decidido llevar un rifle consigo para la excursión.

Una de las niñas, pidió ayuda desde la radio de un bote para que alguien acudiera al rescate. Kidlapik relató:

“Pudimos escuchar la llamada de ayuda. Fue terrible escucharla”.

La muerte de Gibbons ha consternado a su ciudad natal llamada Arviat, a unos 10 kilómetros de la zona del ataque, que poco a poco, se ha acostumbrado a mirar a osos polares que migran hacia el norte.

“Es verdaderamente triste. Vivimos en una comunidad pequeña y cuando pasa algo así, nos afecta a todos”, dijo John Main, legislador local, a una cadena de televisión canadiense.

Con 380 avistamientos de osos polares en Nunavut durante 2017, la región principalmente compuesta por los pobladores inuit, está cada vez más preocupada por la seguridad de los habitantes.

El número de osos polares en la región occidental de la Bahía de Hudson se mantiene estable con alrededor de 840 ejemplares, según los expertos. Sin embargo, en los últimos años han detectado una disminución en su tamaño y malas condiciones corporales.

En Twitter, Kidlapik dijo que las excursiones con osos polares alojados en la región han eliminado el temor de estos animales a los humanos, con lo que los ataques podrían ser más frecuentes. 

La última muerte producto del ataque de un oso polar en Nunavut se produjo en el año 2000 a unos 200 kilómetros de la costa, indicaron las autoridades.

Eric Avanoee, primo de Gibbons lamentó el ataque y dijo:

“Definitivamente Aaron murió como un héroe: protegió a sus hijos”.

Con información de BBC.