Inicio  /  Historias
FAMILIA

“No trabajes demasiado, te arrepentirás”; aconseja padre tras la muerte repentina de su hijo

El hijo de este empresario tenía 8 años, su muerte fue imprevista

Un reconocido empresario compartió un mensaje conmovedor en redes sociales después de la muerte de su hijo. “El trabajo necesita tener un equilibrio que rara vez he vivido. Es un equilibrio que nos permite ofrecer nuestros regalos al mundo, pero no a costa de nosotros mismos y de la familia”, mencionó.

Te recomendamos: Video: Perrita de terapia está aprendiendo a tocar instrumentos musicales

Desde LinkedIn, J.R. Storment compartió con miles de personas su experiencia personal al perder a su hijo y sentir que no tuvo el tiempo suficiente para estar con él.

De acuerdo con el empresario, el tiempo que los padres dan a los hijos está subestimado y no siempre es el mejor, por lo que un cambio incidental como la muerte, supone un nuevo paradigma para el que nunca se está preparado.

“Abraza a tus hijos, no trabajes demasiado, te arrepentirás de haber invertido ese tiempo en otras tareas una vez que ya no tengas a tu familia, supongo que tienes reuniones con muchas personas con las que trabajas. ¿Tienes programadas regularmente esas mismas citas con tus hijos? Si hay alguna lección que sacar de esto, es recordarles a los demás (y a mí mismo) que no se pierdan las cosas que importan“, escribió.

J.R. Storment y Jessica, su esposa, fueron padres de dos gemelos durante ocho años, sin embargo uno de ellos nunca tuvo un gran estado de salud.

“Mi esposa y yo tenemos un acuerdo: cuando uno de los dos llama, el otro contesta. Su respuesta fue fría e inmediata: J.R., Wiley está muerto, me dijo, descubrió que mi hijo había perdido la vida al tratar de despertarlo.

“Corrí directamente hacia la habitación que comparten los chicos pero los agentes me bloquearon el paso”, relató el empresario para ABC. “Pasaron más de dos dolorosas horas antes de que pudiera ver a mi hijo”.

Tiempo después se confirmó que la muerte del menor fue causada por una epilepsia que se le diagnosticó un año antes de su fallecimiento.

Aunque la enfermedad no era grave, este tipo de casos suelen presentarse en menores de 8 a 13 años. Dado a sus ocupaciones, Storment reflexionó sobre los últimos meses con su hijo y por ello extendió la invitación a todos los padres y madres del mundo a tener una vida equilibrada en relación a su familia e hijos.

“Se escuchaba la música de la fiesta de un vecino. Lo acompañé de nuevo a su habitación y cerré todas las ventanas. Dijo que eso era mejor. Tuvimos otro abrazo rápido. Luego me fui a la cama para siempre. A la mañana siguiente me desperté. Tuve varias reuniones consecutivas, hice un viaje, atendí varias llamadas y regresé a mi oficina. Nada de eso me parece tan importante ahora. Me fui esa mañana sin decir adiós o mirar a los chicos”, relató.

Como sentencia final, Storment dijo que “mientras estaba sentado escribiendo esta publicación, mi hijo vivo, Oliver, vino a pedirme permiso para jugar a la consola. En lugar de decir el habitual ‘no’, dejé de escribir y le pregunté si podía jugar con él. Estaba felizmente sorprendido por mi respuesta y nos conectamos de una manera que antes me habría perdido. Las cosas pequeñas importan. El lado positivo de esta tragedia es que he mejorado la relación que tengo con él“.