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En 1993 la identidad del líder del Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones criminales más poderosas de México, era desconocida. No había fotos, ni un rastro para seguirle la pista. Nada que, oficialmente, pudiera dar con el rastro del narcotraficante más peligroso del país en aquel momento.
La investigación por la muerte del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo reveló su identidad. Joaquín “El Chapo” Guzmán
La investigación fue disolviendo la sofisticada red de corrupción que le había garantizado impunidad al narcotraficante. Policías, funcionarios de varias procuradurías, ministerios públicos, gobernadores… la influencia de “El Chapo”, según investigaciones llegaba a la Dirección de la Policía Federal y hasta la Secretaría Particular de la Presidencia de la República.
Pero todo ello fue insuficiente el 9 de junio de 1993, el día que “El Chapo” fue recapturado.
Guzmán Loera fue recluido en el penal de Almoloya de Juárez, hoy conocido como El Altiplano. Dos años más tarde, y luego de un fallido intento de fuga, fue trasladado al penal de Puente Grande en Jalisco.
Aunque fue acusado de homicidio, delincuencia organizada, acopio de armas y tráfico de drogas, fue condenado a 20 años y 9 meses de prisión, sólo por cohecho, asociación delictuosa y delitos contra la salud, pero no cumplió su condena.
Cinco años y dos meses después de haber sido trasladado al penal de máxima seguridad de Puente Grande, el 19 de enero de 2001, escondido en un carro de lavandería, según la versión oficial, “El Chapo” logró darse a la fuga.
Los siguientes 13 años no sólo permaneció prófugo, sino que logró crecer sus operaciones a nivel mundial.
Los brazos de “El Chapo” se extendieron a América Latina, Estados Unidos, Europa, Asia y Oceanía; un total de 54 países, de acuerdo con organismos internacionales. De hecho, se estima que su organización delictiva, el Cártel de Sinaloa, distribuye el 35% de la marihuana y la cocaína que se trafican en todo el mundo.
“Su presencia más fuerte efectivamente es en la unión americana en Estados Unidos, pero llega hasta Canadá, es decir no solamente en términos de su presencia como distribuidor o transportista de droga porque tiene las dos funciones, sino también algo interesante es que aprovechan los caminos financieros y los caminos empresariales para tener presencia no solamente en México sino en otros países”, dijo René Jiménez Ornelas, coordinador de la Unidad de Análisis sobre Violencia de la UNAM.
Se calcula que la exportación de droga a Estados Unidos le deja al Cártel de Sinaloa ingresos brutos por unos tres mil millones de dólares anuales.
El narcotraficante más poderoso de México, y desde 2011 tras la muerte de Osama Bin Laden, también el hombre más buscado en todo el mundo por la Agencia Antidrogas Estadounidenses y la Procuraduría General de la República (PGR) ofrecían, respectivamente, cinco millones de dólares y 30 millones de pesos.
Ese fue “El Chapo” Guzmán hasta el 22 de febrero de 2014, cuando fue sorprendido por elementos de la Marina Armada de México, en un departamento de Mazatlán, Sinaloa, donde, por fin, fue recapturado.
Su destino, una vez más, fue el Penal del Altiplano, en el Estado de México, el penal más seguro de todo el país, el mismo al que fuera trasladado tras su primera captura.
“El Chapo”, entonces, no sólo tendría que cumplir la sentencia trunca de los años 90, sino hacer frente a un proceso de extradición hacia Estados Unidos, donde enfrenta cargos en Cortes de California, Nuevo México, Texas, Illinois y Nueva York.
Un año, cuatro meses y 19 días después de su segunda captura, Joaquín “El Chapo” Guzmán concretó su segunda fuga. De acuerdo a las autoridades, esta vez lo hizo a través de un túnel de 1.5 kilómetros de longitud, que iba desde la regadera de su celda hasta una casa construida en la periferia de penal.
El 8 de enero de 2016 Joaquín “El Chapo” Guzmán fue detenido nuevamente en el estado de Sinaloa.
En mayo de 2016, “El Chapo” fue trasladado a un penal de máxima seguridad en Ciudad Juárez, Chihuahua, donde este jueves 19 de enero fue extraditado a Nueva York, Estados Unidos, donde responderá cargos ante una Corte.
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