Los organizadores de una fiesta en la isla de Salmedina podrían pagar una multa de hasta 4 millones de pesos. Esta semana se difundieron videos en redes sociales donde los asistentes de este evento tenían en sus manos a crías de tortugas carey -una especie en peligro crítico de extinción- para luego arrojarlas al mar (ver recuadro).
La isla de Salmedina se encuentra a unos kilómetros de Anton Lizardo, Veracruz, dentro del Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano. La pequeña isla en el Golfo de México es una zona protegida porque ahí desovan las tortugas carey (Eretmochelys imbricata), de las cuales se tiene un registro de veinte nidos.
Joel González, director general de Inspección y Vigilancia de Vida Silvestre, Recursos Marinos y Ecosistemas Costeros de la Profepa, reveló a Milenio que los responsables podrían ser sancionados con una multa que oscila entre 2,400 y 4 millones de pesos. Hasta el momento se tiene identificada a una persona como el organizador del evento.
Además de las acusaciones de maltrato a una especie en peligro, el funcionario explicó que el organizador carecía del permiso necesario. Según los reglamentos, una autoridad ambiental debe emitir el permiso correspondiente para montar un evento en una zona protegida.
Cabe señalar que no se encontró flora o fauna muerta en el recorrido por la Isla Salmedina; sin embargo, esta Procuraduría sí detectó durante el recorrido embarcaciones de particulares en la Isla sin portar autorización para desembarcar en la zona, por lo que se ordenó el retiro de las personas en el sitio.
Aunque los asistentes a la fiesta dijeron que fueron melindrosos con los nidos y las crías, en los videos se puede ver cómo manipulan indebidamente a los ejemplares y los sueltan directamente en el mar, lo que puede provocar su muerte. Los investigadores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente también hallaron basura inorgánica y restos de pirotecnia en la zona.
