En Inglaterra, una mujer fue a la óptica pensando que necesitaba lentes y fue informada que en realidad tenía un tumor cerebral que tenía que ser operado con urgencia.
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Ellie Musgrove, de 21 años, fue a hacerse un examen de la vista a las 11 de la mañana y a las 11 de la noche estaba siendo sometida a una cirugía cerebral de urgencia.
De acuerdo con su testimonio a medios locales, el tumor que le encontraron era benigno, pero tenía que ser operado inmediatamente porque su vida estaba comprometida.
El tumor es benigno, pero necesitaba ser operada para drenar el líquido en su cerebro | Foto: Pixabay
Musgrove contó que a inicios de año, experimentó fuertes dolores de cabeza y cuello, por lo que su médico de cabecera pensó que podía ser una infección de oído. Sin embargo, el tratamiento no ayudaron a reducir las molestias y decidió hacer una cita con el oftalmólogo, pensando que podía necesitar lentes para aliviar las molestias.
El oftalmólogo detectó que el nervio óptico de ambos ojos estaban inflamados y eso lo hizo presuponer que se trataba de algo más, por lo que la remitió al Manchester Royal Eye Hospital.
Ahí, tras varios estudios, decidieron que tenía que ser trasladada a otro hospital, donde le diagnosticaron hidrocefalia. Es decir, tenía líquido en lo profundo de su cerebro debido a un tumor. Por ello, tenían que operar inmediatamente a Ellie, para drenar el líquido.
“También me diagnosticaron la enfermedad de Addison. El tumor está afectando mi glándula pituitaria, lo cual es un golpe devastador, ya que tendré que tomar esteroides de hidrocortisona por el resto de mi vida”, explicó Ellie. “Los neurocirujanos creen que es un tumor de crecimiento lento, que solo 1 % de las personas desarrollan, así que espero que no necesite cirugía para extirparlo pronto”.
Si la joven no hubiera ido al oftalmólogo, el resultado hubiera sido muy distinto, aseguran los doctores.
