El fin de semana pasado, un trabajador de una atracción turística en California perdió la vida luego de un trágico accidente en la tirolesa. La víctima fue recordada como un héroe ya que sacrificó su vida para salvar a una mujer.
Te recomendamos: Joven comparte que su gato murió intoxicado con lirios y su alerta se hace viral
El hombre fallecido fue identificado como Joaquín Romero, de 34 años de edad, empleado de La Jolla Zip Zoom Zipline en Pauma Valley, al sur de California.
Según el testimonio de un testigo a medios locales, el señor Romero estaba ayudando a una mujer a engancharse en la plataforma de salida cuando ella comenzó a “deslizarse en la cuerda”.
Al no poder detenerla, el trabajador se agarró del arnés de la turista y se deslizó en la línea con ella, a casi 30 metros de la superficie.
A la vez que seguían deslizándose por la tirolesa, Romero temía que su peso combinado con el de la mujer hiciera caer la cuerda, así que tomó la decisión de salvar a la mujer y se soltó del arnés.
La turista salió ilesa del incidente.
El señor Romero sufrió de una caída de 21 metros. El cuerpo de bomberos de la zona rescató el cuerpo; aunque no se detectó un pulso, fue trasladado al hospital. El hombre, padre de un niño, fue declarado muerto dos días después.
Familiares iniciaron una recaudación de fondos en GoFundMe para pagar los gastos funerarios de Romero y abrir una cuenta de ahorro para su hijo. La campaña ha recaudado más de 36 mil dólares, muy por encima del objetivo de 20 mil dólares.
El juego es operado por la tribu de indios luiseños que vive en la reserva india de La Jolla. La tribu compartió el siguiente comunicado:
“Estamos tristes y con el corazón roto por el trágico accidente que involucró a uno de nuestros empleados en La Jolla Zip Zoom Zipline. La tribu, los funcionarios de la tribu, los empleados y los miembros de la tribu expresan nuestras más sinceras condolencias a la familia de nuestro empleado por su pérdida”.
“Ese incidente nunca debió haber ocurrido”, dijo un abogado de San Diego, Bill Berman, a un medio local. “Se violaron numerosos protocolos de seguridad que resultaron en esta tragedia. El operador debería haber sido enganchado a la línea él mismo con un arnés de seguridad. Son reglas operativas fundamentales”.
