Tres días después de haberse electrocutado, por viajar en el techo de un tren, murió José Fonseca, un joven de 18 años de edad.
Los hechos ocurrieron el lunes, cuando “dos personas que indebidamente se subieron al techo… que provenía de Mar de Plata, (Argentina), fueron alcanzados por una descarga eléctrica de 25.000 voltios”, informó Trenes Argentinos, en un comunicado citado por el diario Clarín.
Los dos hombres electrocutados recibieron atención médica. Uno de ellos, José Fonseca, estaba grave y fue trasladado a un hospital, pero este jueves murió de un paro cardiorrespiratorio.
La descarga eléctrica le provocó quemaduras en casi el 80% de su cuerpo, detallaron las autoridades.
Yo estaba sentado agarrando mi mochila y él se levantó para ver cuánto faltaba para la próxima estación. Ahí tocó el cable y salió volando”, relató Ciro Ferreyra, quien viajaba junto a Fonseca.
Imagen del incidente en un tren de Argentina. (clarin.com)
Ferreyra, de 20 años de edad, narró que él y su amigo José, de 18 años, son malabaristas que fueron a la ciudad de Mar del Plata a trabajar, en enero. Para regresar, como no tenían dinero, decidieron subirse al techo del tren, detalló el diario Clarín.
Hicimos casi todo el viaje bien. Cuando entramos a la zona de Buenos Aires aparecieron los postes eléctricos. Sabemos del peligro de viajar así. Pero suponíamos que viajando así, sentados y tranquilos, no iba a pasar nada”, agregó Ferreyra.
Trenes Argentinos Operaciones, sociedad encargada de los servicios ferroviarios, explicó que no hace falta tomar contacto con el cable directamente para sufrir heridas: su radio de acción puede llegar hasta medio o un metro.
Suponemos que nunca llegaron a tocar la catenaria (cable), pero se electrocutaron igual, aunque con consecuencias menos graves. Pudo haber sido el amplio radio de acción de la misma o bien que la hayan tocado con una mochila, por ejemplo. Si hubieran hecho contacto directo, no habría habido posibilidad de que sobrevivieran”, agregó uno de los expertos.
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RMT
