Ricardo A. Silva Díaz, Rector de la Escuela Libre de Derecho (ELD), indicó que en México se requiere construir una Suprema Corte de Justicia de la Nación más sensible a las víctimas, debido a que en el país se vive en un constante escenario de inseguridad y de violación a los Derechos Humanos.
Lo anterior surgió a raíz de que el presidente Andrés Manuel López Obrador enviara al Senado su primera terna de aspirantes para ocupar un lugar en el máximo órgano de justicia, por lo que Silva Díaz aseguró que el mencionado proceso de selección representa una oportunidad para elegir a un perfil de ministro que empatice con las personas que han sido violentadas en sus derechos.
Por otro lado, el también Maestro de Derechos Humanos señaló que dos de los candidatos ideales para ocupar el puesto, son Celia Maya García y Juan Luis González Alcántara-Carrancá, quienes cuentan con una amplia trayectoria jurisdiccional.
Asimismo, apuntó que el órgano legislativo debe buscar una integración plural, y en este caso, Loretta Ortiz Ahlf podría aportar esa visión hacia las víctimas que han sufrido la violación de sus derechos humanos.
Por otro lado, comentó que uno de los principales retos de la SCJN es contar con un candidato que aporte argumentos para la protección de derechos, y que sea un conocedor basto del Sistema Interamericano y el Sistema Internacional, al cual México abrió sus puertas en el año 2011.
“Me parece que el conocimiento sobre sistemas internacionales y el empoderamiento de los derechos de las personas ha sido una labor constante en la carrera de la Dra. Ortiz, actividad que ha combinado con la investigación y el trabajo en órganos directivos escolares, lo cual sin duda aportaría una visión plural en la toma de decisiones en la Corte, pero sobre todo en una época en la que la sociedad busca paridad, sería un extraordinario mensaje que el máximo tribunal quedara integrado con tres mujeres ”, aseveró Ricardo A. Silva Díaz.
Finalmente, profundizó en en la importancia de llevar a la SCJN a un ministro o ministra que cuenten con perfiles de investigación formados desde la academia y lo teórico.
“Esto permitiría que la construcción y eficacia de los derechos sea mejor; que se disminuya la política y se fortalezca la teoría. Hay ejemplos claros de decisiones relevantes de la Corte que se basaron en investigaciones realizadas sobre sus implicaciones, como la inhabilitación a militares por ser portadores de VIH, el uso lúdico de la marihuana o la despenalización del aborto, cuyos resultados han arrojado la implementación de diversas políticas públicas en la materia”., concluyó Silva Díaz
