Inicio  /  Historias
DEPORTES

Medallista invidente canta en el Metro para costear sus viajes a competencias de atletismo

Sin el apoyo de la Conade, Alejandro Pacheco tuvo que cantar en el Metro para seguir entrenando y costear sus viajes a competencias deportivas. Él es un atleta invidente con varias medallas en su trayectoria y ahora debe recurrir a las redes sociales para solicitar apoyo y así cumplir su objetivo de participar en los Juegos Paralímpicos.

Este joven era otra persona cuando perdió la vista a los 19 años de edad. En su adolescencia se había dejado llevar por los vicios del alcohol y las drogas, a tal grado de provocarse a sí mismo una intoxicación neurocerebral. Por tal motivo, padeció inflamaciones en varias partes del cuerpo y se le atrofió el nervio óptico.

Afortunadamente, Pacheco pudo encontrar otro propósito en la vida. Una maestra de nombre Maria Rosa Montalvo Sánchez lo invitó a formar parte de su equipo de atletismo para ciegos y, desde los 22 años de edad, se ha dedicado a correr. Así describió su situación a Récord.

Dicen que hay que estar en la oscuridad para ver la luz, y es muy cierto, si yo no hubiera perdido la vista no hubiera descubierto lo que soy capaz de hacer, no estaría apoyando a más personas con la misma discapacidad, pero esto me da otra oportunidad y lo veo más como un regalo que como una pérdida.

https://noticieros.televisa.com/historia/video-lanza-como-superman-ganar-carrera/

Solo tuvieron que pasar dos años para que Pacheco se posicionara entre los mejores corredores del continente americano, al competir en sus primeros Panamericanos y colocarse en el tercer lugar de los rankings. “Es cuando voltean a verme Conade y la Federación,” dijo Pacheco.

Cuando logro ganar en Brasil se me da un apoyo como talento deportivo que era de dos mil pesos al mes, ahí no me dedico más que a entrenar; un año después pierdo los selectivos a Río y la Federación me quita el apoyo.

Al perder estos apoyos de la Federación Mexicana de Ciegos y Débiles Visuales y de la Conade, Pacheco se ve obligado a ‘vagonear’, es decir, a cantar en el Sistema de Transporte Colectivo para no dejar de entrenar y competir en otros eventos, como el Maratón de la Ciudad de México. En la edición de 2018, Pacheco y su guía quedaron en el primer lugar en la categoría de débiles visuales.

A lo largo de su trayectoria, Pacheco se ha destacado en los 800 metros y 1500 metros planos, así como en pruebas de larga distancia como la de 5 mil metros.

El año pasado fue complicado para Pacheco. Tuvo problemas con vagoneros que le reclamaban su “territorio” y fue agredido en un caso que se convirtió en un escándalo para las autoridades locales. Se presentó al Ministerio Público para denunciar las agresiones, pero a su vez fue discriminado por su condición, por lo que tuvo que recurrir a Derechos Humanos para levantar una queja.

En la actualidad, Pacheco cuenta con un pequeño apoyo de la Conade pero también ha recurrido a las redes sociales, ya que el dinero de la entidad federal del deporte no es suficiente para costear los gastos de su equipo. Su objetivo al corto plazo es viajar a Arizona, a finales de mayo, para participar en los Desert Challenge Games.

También busca ir a Cuernavaca para competir en el selectivo e incorporarse a la delegación mexicana que irá a Lima, Perú, sede de los Juegos Parapanamericanos en agosto. “Y no sólo pegarle, si no traer medalla; ese es el objetivo de este año,” afirma Pacheco.

Con información adicional de Plumas Atómicas.