Una intensa tormenta eléctrica que cayó sobre la ciudad australiana de Sídney fue el escenario perfecto para que más de 4 mil 600 rayos cayeran sobre sus calles y edificios.
El azote eléctrico paralizó la ciudad, dañó casas, provocó apagones e interrumpió los servicios aéreos y de ferrocarril por varias horas.
Por otro lado, los especialistas indican que un fenómeno similar o mucho peor podría aparecer en las próximas horas y causar todavía más inconvenientes.
Actualmente Australia está sumergida en uno de los veranos más calurosos en muchos años y es en esta temporada en la que las tormentas eléctricas intensas se hacen presentes.
De acuerdo con el metereólogo Jordan Notara, la tormenta eléctrica es “típica del verano australiano”.
Por su parte, el Servicio Metereológico Nacional ya advirtió a todos los residentes de la región conocida como Nueva Gales del Sur, tomen precauciones, pues la actividad eléctrica provocada por el clima continuará durante los próximos días.
Entre las recomendaciones de seguridad destacan amarrar bien todos los muebles que se encuentren fuera de casa y mantenerse lejos de las ventanas.
Según fuentes locales, las tormentas eléctricas que paralizaron Sídney sucedieron entre las 3 y las 6 de la mañana del lunes.
Se cree que esta actividad se verá intensificada durante la tarde, justo cuando comiencen a caer las primeras gotas de lluvia sobre la región.
Samantha Chari, encargada del canal del clima Sky News, indicó que existen altas probabilidades de que una tormenta conocida como “supercélula” se presente durante la tarde del martes.
Este tipo de fenómenos son provocados por la intensa actividad del viento sobre las tormentas, mismas que rotan sobre su propio eje y adquieren más fuerza conforme avanzan.
Otros lugares donde suceden este tipo de tormentas son las Grandes Llanuras de Estados Unidos y las llanuras de la pampa argentina.
