Una manada de leones logró cazar y devorar casi en su totalidad a un cazador furtivo en la reserva ecológica Hoedspruit del parque nacional de Kruger, al noreste de Sudáfrica.
Según la agencia de noticias AFP, lo único que dejaron los leones del cazador fue su cabeza, algunos restos de su cuerpo y el fusil con el que solía cazarlos de manera ilegal.
El resto del cuerpo fue devorado por los leones que lograron darle caza.
La Policía sudafricana indicó a los medios de comunicación locales que su teoría es que el cazador se encontraba operando ilegalmente cuando fue atacado por un grupo de leones que lo devoró en pocos minutos.
En Sudáfrica la caza furtiva ha reclamado la vida de miles de leones que son mutilados para vender sus partes al mercado negro local.
Secciones como la cabeza, carne y órganos de los leones son utilizados en la medicina tradicional por sus practicantes, que suelen darles propiedades místicas capaces de curar ciertas enfermedades o maleficios.
Actualmente el animal salvaje más afectado por la caza ilegal es el rinoceronte, cuyo cuerno llega a venderse a precios muy altos en partes de África y Asia.
En enero pasado, un cazador de origen croata fue asesinado de un tiro en una reserva privada en Sudáfrica cuando intentaba matar a un león con su escopeta.
Según un amigo que estaba con él durante el incidente, aún no se sabe quién disparó la bala que lo mató.
Esa reserva en la que murió aquel cazador fue diseñada para permitirle a sus clientes cazar todo tipo de animales salvajes con la relativa seguridad de que estos no atacarían pues estos eran criados en cautiverio exclusivamente para ser asesinados.
El objetivo del cazador asesinado era matar una presa más grande en África después de haber “cazado todo lo que pudo en Europa”.
