Todos los dueños de perros saben que sus mascotas sienten un apego especial hacia ellos. Pero, ¿qué tantas emociones compartimos con ellos? ¿Pueden no solo demostrar cariño, sino mostrar otras emociones como por ejemplo los celos?
Te recomendamos: Cierran 8 mil papelerías en México por coronavirus
A decir de Alberto Tejeda Perea, coordinador del área clínica del Hospital de Especialidades en Etología y Fauna Silvestre de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ) de la UNAM, los perros no solo pueden sentir las mismas emociones que el ser humano, sino que además son capaces de desarrollar y sentir emociones negativas como los celos.
Según explicó el doctor Tejeda a UNAM Global, por más distintos que se puedan ver por fuera, entre perros y seres humanos hay coincidencias fisiológicas y neurofísicas que les permiten “sentir las mismas emociones”.
Ahora bien, aunque sean las mismas emociones, estas llegan con un matiz: emocionalmente los perros tienen una madurez semejante a la de un niño pequeño y esto tiene que ver con la forma en que surgieron. Los perros son el resultado de la domesticación del lobo salvaje.
Los perros sienten las mismas emociones que los humanos. (Imagen: Pexels)
En esos términos, un perro sería una versión mentalmente inmadura de un lobo. Según el especialista de la UNAM, eso puede modificar la forma en que percibe las emociones, como el apego.
Para saber cómo funciona el apego de perros hacia sus dueños se han hecho estudios que involucran técnicas como la prueba de Ainsworth, nombrada así en honor a la psicóloga que la desarrolló. Originalmente esa prueba sirve para estudiar cómo los infantes se desenvuelven con sus cuidadores y con extraños.
Cuando estas mismas pruebas se han desarrollado con perros se ha encontrado que tienen respuestas semejantes a las de un infante de 3 años.
Por supuesto, que los canes tengan las mismas emociones que los humanos es un alegato en contra de las situaciones de abuso y maltrato de las que podrían ser objeto y, según el doctor Tejeda, estas consideraciones deberían ser tomadas en cuenta aun desde un punto de vista jurídico.
Si alguna vez te preguntaste qué siente por ti tu mascota, la voz de los expertos es clara: siente por ti lo mismo que tú por él.
