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ARTE Y CULTURA

¿Has probado las hormigas oaxaqueñas que cuestan hasta mil pesos por kilo?

Aunque también se pueden encontrar en los platillos típicos de algunas regiones de Puebla, Hidalgo, Veracruz, Chiapas y Guerrero, las chicatanas establecieron su fama culinaria en el estado de Oaxaca.

La chicatana es la reina de las hormigas arrieras, una subespecie de las atinas cortadoras de hojas. El nombre de la reina proviene del náhuatl, tzicatl de tzi-ntli que significa trasero, y azkatl que se traduce como hormiga.

Este exquisito manjar que data de la era precolombina (según se documenta en el Códice Florentino) se presta para hacer salsas, moles y tamales, pero capturar a las chicatanas no es cosa fácil.

Los recolectores deben buscar estas hormigas voladoras por la madrugada, entre los meses de mayo y julio. A causa de las intensas lluvias que se registran al sur del país durante este periodo, una vez que escampa, las chicatanas salen de sus hormigueros para fecundar.

También conocidas como “bolsonas”, las chicatanas llegan a medir hasta 2.5 centimetros de longitud, son agresivas y su mordida es muy dolorosa, por lo que hay que tener cuidado a la hora de cazarlas. Una vez capturadas, deben ser tostadas y desprendidas de sus alas. Ya en este estado se pueden preparar diversos platillos.

Se dice que las regiones de Oaxaca más populares donde se pueden encontrar estos platillos son la Costa, Valles Centrales y la Sierra. En la Ciudad de México se puede adquirir en el mercado de San Juan, aunque dada la escasez del producto, un kilo de chicatanas puede alcanzar un valor de mil pesos.

Otros factores que han incrementado el costo de las chicatanas han sido la demanda de ciudadanos extranjeros que han descubierto este “secreto” de la gastronomía oaxaqueña, y claro, la destrucción del hábitat natural de la hormiga arriera a causa de nuevos desarrollos urbanos.

Entre los beneficios para la salud por su consumo, la chicatana es rica en proteínas, tiene propiedades antibacteriales, al igual que bajos niveles de grasas saturadas. También se dice que ayudan al tratamiento de la artritis reumatoide.

Con información de Inecol.