Unos grabados descubiertos recientemente en Arabia Saudita acaban poner en duda varias teorías preexistentes sobre la domesticación de los perros.
De una antigüedad aproximada de entre ocho mil y nueve mil años, los grabados muestran hombres armados canzando junto a perros que parecen estar amarrados con correas.
Los grabados permiten comprender con más precisión cuándo fueron domesticados los canes y cómo es que la humanidad logró hacerlos sus aliados aún antes de la domesticación de las vacas o las cabras.
El perro de Canaán una de las especies más tempranas de perros (Pixabay)
Se cree que los perros representados en los muros de la cueva pertenecen a una raza que aún existe: el perro de Canaán, pero los científicos aún no saben cuándo fue que el perro se separó del lobo y comenzó a compartir el espacio con los hombres.
Se cree que los primeros perros surgieron hace aproximadamente 33 mil años en Asia y que fueron ellos los que domesticaron a los primeros seres humanos al acercarse a sus asentamientos en busca de comida.
En los aproximadamente 350 grabados se pueden ver varias escenas de caza, una en la que varios hombres parecen guiar a un grupo de perros con correa y otra en la que hombres y canes son aliados contra un león de gran tamaño.
Los científicos que estudian estos grabados consideran que tal vez sin los perros, la humanidad temprana no habría podido sobrevivir debido a que en algunas épocas del año, la comida escaseaba y la caza era fundamental para mantenerse con vida.
Se cree que tienen entre 8,000 y 9,000 años de antigüedad (PALAEODESERTS SURVEY).
Sin embargo, existe un problema con estas antiguas representaciones: su datación no es directa, pues para calcular su antigüedad usaron dataciones previas de otros objetos que había al interior de la cueva.
Aún así, el conocer que la humanidad ya se había aliado con los perros para anteponerse a las adversidades de aquella época.
Lo más fascinante del descubrimiento de estos grabados es que demuestran que la humanidad de Medio Oriente se le había adelantado al neolítico al domesticar perros, pues esta etapa de la evolución humana todavía no llegaba a esa región.
En la cueva hallaron 350 grabados (PALAEODESERTS SURVEY).
Además, se sabe que los lobos, al no ser naturales de esa región durante esos tiempos, tuvieron que haber viajado con los humanos hacia la zona donde encontraron los grabados desde otro lugar del planeta.
Aún queda mucho por descubrir pero estas representaciones pictóricas de la Edad de Piedras pueden demostrar que la amistad entre los canes y los humanos se remonta más allá de lo que pensábamos.
Sin embargo, los grabados todavía tienen un misterio que revelar: el momento preciso en el que el lobo y el perro se separaron.
