La aparición de manchas en la piel es algo de lo que las personas deben estar atentas, pues si bien pueden ser benignas, algunas de ellas también podrían manifestar un tipo de cáncer, así como le sucedió a una joven de Estados Unidos que convivió por 10 años con lo que ella pensó era un lunar. Esta es la historia.
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A través de su TikTok y entrevistas con medios, la historia de Maria Sylvia ha logrado hacerse viral debido al extraño pero ejemplar caso.
Cuando iba al colegio le apareció una línea color marrón en la uña de su pulgar derecho. Debido a que practicaba muchos deportes, Maria pensó que se trataba de una ampolla de sangre o un moretón. Sin embargo, tras acudir al podólogo por una uña encarnada, el médico también le sugirió que se revisara la uña de su mano con un dermatólogo.
“(El dermatólogo) básicamente dijo que lo más probable es que se tratara de un lunar bajo el lecho ungueal y que probablemente no sería motivo de preocupación porque la alternativa era como un 1% de posibilidades de que fuera este cáncer”, dijo Sylvia en entrevista con Today.
Tras el diagnóstico inicial, Maria no se preocupaba demasiado por la mancha en su uña, aunque le mencionaron que debía mantenerse al tanto por si se obscurecía o crecía. “Crecí aceptando que era solo una parte de mi mano”, dijo.
Sin embargo, todo cambió en el otoño de 2021 cuando un amigo se puso en contacto con Maria después de leer algo relacionado al melanoma subungueal y le instó en acudir al médico.
“Vio una foto que se parecía a mi pulgar y me la envío: ‘Tienes que hacértelo mira'”, dijo Sylvia sobre lo que le hizo saber su amigo, a quien le agradece por haberlo hecho.
Tras acudir a un dermatólogo en enero de 2022, el especialista aún dudaba de que se tratara de algo más, pero Maria insistió en que se le realizara una biopsia en la cual se le extrajo una pequeña porción de piel del lecho ungueal.
Una semana después de la biopsia, los resultados estuvieron listos. “Hemos encontrado un melanoma“, le dijeron.
Un melanoma subungueal es un tipo de cáncer de piel que se forma en el lecho de las uñas de los dedos de las manos o de los pies. “Es un subtipo bastante raro. Sin embargo, debido a ello, puede pasar desapercibido y seguir durante años sin ser reconocido”, dijo un especialista al medio mencionado.
Respecto al tratamiento de Sylvia, el dermatólogo le recomendó que hiciera cita con un oncólogo para comenzar su tratamiento
“Mi oncólogo me informó de que tenía el estado cero y fue bueno que viniera cuando lo hice, porque eso significa que el cáncer estaba aislado en el lunar de mi pulgar”, contó Sylvia.
Maria fue sometida a dos cirugías, una para extirparle el lecho ungueal y los tejidos alrededor, procedimiento que confirmó que el cáncer no se había extendido; posteriormente se utilizó piel de su antebrazo para cubrir su pulgar, que ahora no tiene uña.
