Inicio  /  Historias
SALUD

¿Qué tan infieles somos en México?

La infidelidad en México es una de los motivos principales de divorcio.

¿Sabías que la infidelidad en México dentro del matrimonio estuvo penalizada hasta el año 2011? Y no sólo eso, quien logró despenalizarla fue el entonces diputado Jorge Kahwagi, sí, el boxeador controversial que también participó en el reality show Big Brother VIP.

 

De hecho, la infidelidad en México podía significar prisión de hasta dos años y privación de derechos civiles hasta por seis a quien se le encontrara culpable de “adulterio cometido en el domicilio conyugal o con escándalo”. Esto implicaba el hecho de tener relaciones sexuales extramaritales y en la actualidad, de manera legal sólo aparece como causalidad de divorcio.

Además, la penalización en México de la infidelidad estaba ligada a prácticas anacrónicas que los hombres llevaban a cabo con el fin de “mantener la propiedad” sobre las mujeres y tenerlo clasificado como delito funcionaba sobre todo para proteger el honor de los hombres.

 

En cuanto a que sea parte de las estadísticas de divorcio, de acuerdo con el INEGI y sus estadísticas del año 2020, sólo en un estado de la República de México (Querétaro) la infidelidad fue la tercera causa del divorcio.

 

Sin embargo, hay más estadísticas que hablan sobre la infidelidad en México más allá del divorcio y, por ejemplo, de acuerdo con un estudio realizado a 300 mexicanos por un sitio de citas y una agencia de marketing, la infidelidad es “algo natural” para el 53 por ciento de los participantes.

 

Este estudio también reveló que 57 por ciento de los encuestados consideraban que una infidelidad implicaba el sexo con otra persona y que sólo 32 por ciento de ellos consideraban la infidelidad emocional como engañar a la pareja.

 

Por otra parte, otra encuesta telefónica realizada por el portal hounters.mx demostró que los hombres son, hipotéticamente, más infieles que las mujeres, con 77 por ciento de los encuestados aceptando que serían infieles a sus parejas si la oportunidad se presenta y no hay riesgo de ser cachados, mientras que de parte de las mujeres, 52 por ciento aceptó que lo haría.