El gobierno de Honduras exigió a México investigar el asesinato de dos adolescentes migrantes y el intento de homicidio de un tercero en Tijuana.
A través de un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Honduras indicó que el Ministerio Público mexicano había reportado el hallazgo de los cuerpos de dos menores asesinados por desconocidos en la franja fronteriza de Baja California.
En el documento también se le exige a la Secretaría de Relaciones Exteriores de México asegurar la protección de un tercer menor que corre peligro por conocer detalles del asesinato de los otros dos adolescentes.
Por su parte, la cancillería dijo trabajar en la repatriación de los cuerpos de los dos menores.
Las víctimas del ataque eran dos adolescentes de 16 y 17 años de edad, miembros de la Caravana Migrante que partió de Honduras para dirigirse a la frontera de México con Estados Unidos en busca de una mejor calidad de vida.
Ambos murieron estrangulados por sujetos desconocidos en la zona norte de Tijuana.
Las investigaciones indican que las víctimas fueron persuadidas a ir a un lugar identificado como un picadero (donde se comercian y consumen drogas) por una joven que les prometió sexo.
Fue al interior de un inmueble en el que una o más personas atacaron a los menores.
El tercer menor agredido también resultó herido pero logró escapar, por lo que el gobierno de Honduras teme que haya represalias en su contra, ya que su testimonio podría revelar datos importantes sobre los agresores.
Según reportes preliminares, el joven superviviente salió del inmueble porque prometió ir por dinero y trabajar con sus agresores, quienes le creyeron y lo dejaron ir con la esperanza de que no acudiera con las autoridades, indicó Jorge Álvarez, subprocurador de Justicia de Tijuana.
A pesar de no contar con identificaciones, los cuerpos fueron reconocidos por el tercer joven, ya que iba con ellos antes de que los asesinaran y abandonaran sus cuerpos en la vía pública la madrugada del domingo 16 de diciembre.
Según el superviviente, los jóvenes no fueron al picadero a consumir drogas, sino a encontrarse con la joven que los enganchó para seguirla.
Según datos de la cancillería de Honduras, al menos nueve miembros de las distintas caravanas migrantes que acuden del centro del continente a la frontera con Estados Unidos, han muerto.
Otros dos hondureños han muerto en Baja California: uno por sobredosis y otro más al ser atropellado.
