Para ella es como si un sueño, el llamado Sueño Americano, se hubiera hecho realidad.
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Hija de inmigrantes provenientes de Guerrero y Guanajuato, María de los Ángeles Benítez, de 17 años de edad, consiguió varias becas que le ayudarán a pagar sus estudios en la Universidad de Georgetown, considerada entre las 20 mejores de Estados Unidos.
Para su familia, que subsiste vendiendo pan hecho en casa en el Barrio de Las Empacadoras, al sur de Chicago, siempre fue una ilusión que alguno de sus hijos estudiara en la universidad y gracias a la beca que la joven consiguió a través de su perseverancia y esfuerzo, ella se convertirá en la primera en la familia Benítez en asistir a una.
A través de varias becas que cubren un total de 74 mil 60 dólares por el año académico 2018 a 2019, María de los Ángeles y su familia solo tendrán que pagar 160 dólares por acceder a un nivel superior de educación.
“Yo abrí la carta frente a mi padre y era algo que incluso él no creía, no sabía qué pensar,” recuerda la joven.
Pablo Benítez, su padre, es originario de Guerrero, México y hornea panes y pasteles en su casa para que María del Carmen Perez, su esposa y oriunda de Guanajuato, los venda en las calles del vecindario.
Esta es su única manera de sacar adelante a su familia.
María de los Ángeles, por su parte, también trabaja, pero no en el negocio familiar, sino en un café local al que asiste después de ir al escuela.
La joven también pertenece a la banda de la escuela secundaria Horizon Science Academy, en la que toca el saxofón.
El señor Benítez, de 55 años de edad, recuerda que cuando su hija le enseñó la carta de aceptación, le dieron ganas de llorar.
“No hay palabras,” dijo Pablo Benítez. “La emoción es tan grande, porque ella lo buscó, ella luchó. Aunque también siento feo que se me va a ir pues si es para su bien, qué bueno. Yo le digo que si su futuro está allá, que no lo piense”.
Entre los retos que tuvo que superar la joven mexicoestadounidense, destaca la violencia que ha marcado su barrio desde hace carias décadas.
El Barrio de Las Empacadoras, donde viven María, sus padres y sus tres hermanos, ocupa el puesto número ocho entre los 10 con más homicidios de la ciudad de Chicago, según el departamento de Policía local.
María de los Ángeles recuerda que lo que la hizo querer estudiar ciencias políticas fue el caso de su hermano Juan, de 21 años de edad, que tras tener varios roces con sus compañeros en la escuela y con la ley, fue reclutado por una pandilla local, algo que la marcó para siempre.
