El congreso de Guerrero prohibió el uso de popotes y unicel en todo el estado.
Hace unos días, el congreso de Guerrero aprobó por unanimidad la prohibición de todos los plásticos de un solo uso como popotes, bolsas y utensilios de unicel. Después de algunas deliberaciones, los legisladores aprobaron el dictamen con proyecto de decreto por el que se adiciona el artículo 49 Bis y se deroga el segundo párrafo al artículo 49 de la Ley 593 de Aprovechamiento y Gestión Integral de los Residuos del Estado de Guerrero.
Esta iniciativa había sido presentada en noviembre del año pasado durante el primer periodo ordinario de sesiones. Fue propuesta por los diputados de Morena, Moisés Reyes Sandoval y Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros y dictaminada por la Comisión de Recursos Naturales, Desarrollo Sustentable y Cambio Climático.
En la discusión, se mencionó que cada persona consume, anualmente, 650 bolsas de plástico. Esto produce una acumulación de entre 0.1 a 0.25 millones de toneladas métricas de plástico por cada kilómetro cuadrado en los mares de México. Y todos estos compuestos altamente contaminantes tardan entre 50 y 100 años en descomponerse. El plástico es, actualmente, uno de los mayores problemas de contaminación en los mares de México… y se está convirtiendo, incluso, en un problemas serio de salud para la fauna local e, incluso, para los seres humanos.
El diputado morenista Moisés Reyes Sandoval explicó que, en días recientes, se avistaron más de 100 tortugas muertas en Playa Bonfil.
“Los popotes y las bolsas tardan más de 100 años en degradarse por sólo cinco minutos de uso. Vamos a morir y los popotes seguirán flotando en el mar. Es meternos bolas de cáncer al cuerpo. Guerrero es uno de los estados con mayor mortalidad por cáncer”, declaró a Milenio.
Con esta reforma al artículo 49 Bis de la Ley 593 de Aprovechamiento y Gestión Integral de los Residuos queda terminantemente prohibido que se utilicen bolsas de plástico desechable, productos de unicel y popotes en cualquier establecimiento industrial, comercial o en servicios en los municipios. Por supuesto, hay excepciones de sentido común: se excluyen de estas medidas los empleos en hospitales o por cuestiones médicas, siempre y cuando se aseguren de que son biodegradables. También, estos materiales podrán ser usados para la conservación de alimentos y por razones de higiene.
Esperemos que esta medida siga replicándose en otros estados de la república y que pronto se prohíba el uso indiscriminado de plásticos en todo México. Mientras, es nuestra responsabilidad usar estos materiales tan contaminantes de forma responsable.
