Esta semana, un hombre de Londres fue sentenciado por estrangular a su esposa en agosto del año pasado. El agresor todavía intentó calcinar el cuerpo para eliminar la evidencia, todo esto mientras sus hijas seguían en casa. Fueron éstas las que contactaron a las autoridades.
Thomas Peter, de 50 años de edad, vivía con su mujer, Karen Peter, y sus tres hijas, en el barrio londinense de Romford. En una noche de agosto de 2018, las niñas fueron despertadas por un grito ahogado proveniente del cuarto de sus padres.
Cuando salieron de su recámara para ver de qué se trataba, el señor Peter pateó la puerta y se encerró en su cuarto, alegando que estaba desnudo y se había lastimado su rodilla. También les dijo a las niñas que su madre había salido a caminar.
Las hijas llamaron a la madre por teléfono y se dieron cuenta que el dispositivo sonaba en el cuarto de sus padres. La señora no había salido a ningún lado. Luego escucharon a su padre mover algo pesado por el cuarto.
Fue entonces que una de las hijas llamó a los servicios de emergencia, “Creo que mi mamá ha sido estrangulada.” Otra de las menores acudió a un vecino para que las ayudara, pero cuando el vecino llegó a la residencia, se encontró con el señor Peter.
“Las niñas dicen que maté a su madre, pero no es cierto.” El hombre le pidió a su vecino que se marchara, insistiendo que la señora Peter simplemente salió a caminar.
Incluso los padres de Karen Peter llegaron al hogar, pero el hombre les repitió que su mujer no estaba en casa y que nunca sería capaz de hacerle daño.
Las niñas volvieron a llamar a los servicios de emergencia cuando vieron que salía humo por debajo de la puerta del cuarto de sus padres. El padre dijo que había prendido una vela y la dejó caer.
Cuando los bomberos llegaron a la residencia de los Peter, tumbaron la puerta del cuarto de los padres y encontraron el cuerpo sin vida de Karen Peter. En su boca tenía un pedazo de tela y parte del cuerpo mostraba quemaduras.
El hombre fue detenido por la policía bajo sospecha de haber asesinado a su esposa. El señor Peter negó su culpabilidad, pero la autopsia demostró que la mujer había perdido la vida a causa de una compresión del cuello.
En el juicio salió a luz que Thomas Peter tramitó una póliza de seguro de vida para la pareja, dos meses antes del asesinato. Por la muerte accidental de su esposa, el señor Peter recibiría 310 mil libras.
Peter y Karen se casaron 1994 y tuvieron tres hijas. En 2010 se divorciaron porque el marido se había vuelto violento y controlador, pero se volvieron a casar en 2012.
Con información de The Sun.
