Encuentran tesoro en su jardín y lo devuelven a sus dueños, que no podían creer verlo de nuevo tras darlo por perdido.
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Piedras preciosas, joyería y al menos 52 mil dólares fue el tesoro que una pareja de Staten Island, al sur de la Ciudad de Nueva York, encontró en su jardín trasero cuando intentaban resolver el problema de los ciervos que se comían los árboles en el patio trasero.
Al realizar el aseo al patio donde estaba el jardín, encontraron entre la maleza y restos de árboles muertos una caja fuerte oxidada y vieja semienterrada en el suelo, dentro de la cual había oro, diamantes y un misterioso papel en el que se había escrito una dirección.
Hallan tesoro en su jardín trasero y lo devuelven a sus vecinos (The New York Post).
Matthew y Maria Colonna-Emanuel, la pareja que encontró el tesoro, dijo a los medios locales que primero habían pensado que se trataba de un codificador como los que usan las compañías de cable, pero que pronto llegaron a la conclusión de que se trataba de una caja fuerte que había sido enterrada años antes de su llegada.
La dirección escrita en el pedazo de papel que acompañaba el tesoro, los envió muy cerca, a casa de sus vecinos.
Tanto Matthew como Maria, dijeron al The New York Post, que cuando fueron a la dirección a la que los había dirigido el recado, una persona les abrió y les contó que reconocían la caja fuerte y todo lo que contenía en su interior pues en 2011 había sufrido el robo de la misma.
La Policía confirmó que quienes vivían en esa dirección eran los dueños legítimos de la caja fuerte y su contenido debido a que en 2011 habían levantado el reporte de su robo.
En aquella ocasión, el responsable del robo fue Robert H. Constanzo, conocido entre la comunidad de Staten Island como el “ladrón ninja“, a quien la Policía detuvo años más tarde.
Actualmente Costanzo cumple una condena por 160 robos solo en Staten Island, indicó Univisión Noticias.
El elefante de cerámica marca el punto del insólito hallazgo (The New York Post).
Por ello tanto Matthew como Maria estuvieron de acuerdo en regresar el tesoro a sus antiguos dueños.
Matthew contó al periódico local que la dueña del tesoro lo abrazó fuerte, aún incrédula de que, tantos años después de haber dado por perdida la caja fuerte, regresara a ellos de manos de sus nuevos vecinos.
Maria relató que hubo quienes le preguntaron porqué devolvió la caja fuerte, pregunta a la que responde con un firme “la verdadera recompensa es el buen karma“.
De acuerdo a Univisión Noticias, el lugar del hallazgo ahora es ocupado por un elefante de cerámica.
