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¿Cuándo el SAT puede fiscalizar tus cuentas bancarias?

El SAT puede llamar la atención de un contribuyente si detecta un movimiento sospechoso en sus cuentas bancarias

El SAT cada vez presta más atención a los movimientos entre las cuentas personales de los contribuyentes. Te decimos en qué momento el SAT podría fiscalizar tus cuentas bancarias y qué podría pasar si te llama la atención.

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En la última década el Servicio de Administración Tributaria (SAT) adquirió mayores poderes para vigilar de cerca las operaciones bancarias de los contribuyentes. El fin es detectar posibles discrepancias entre lo que una persona declara ganar y lo que ingresa en sus cuentas bancarias.

El SAT puede pedir informes a tu banco de los movimientos que realizas entre tus cuentas, así como verificar cuánto ingresas en ellas. Cuando detecta una posible diferencia entre los ingresos y lo que se declara en impuestos, se dice que ha encontrado una “discrepancia fiscal”.

El SAT puede pedir informes a tu banco sobre tus cuentas. (Fuente: Pexels)

Si Hacienda detectara una irregularidad en tus cuentas, te pedirá que expliques el origen de los ingresos en una plazo de 20 días. En caso de determinar que esos ingresos debían ser declarados, podría imponer una multa, además de hacerlos susceptibles de ser gravables con ISR.

¿Cómo evitar una llamada de atención del SAT?

En caso de que te preocupe una llamada de atención por parte de Hacienda, toma en cuenta los siguientes puntos.

Si tienes dos o más cuentas, como puede ser una cuenta de ahorro, procura hacer movimientos entre en ellas a través de transferencias bancarias y no a través de depósitos en efectivo. El SAT presta especial atención a los depósitos en efectivo que suman más de 15 mil pesos al mes.

Son preferibles las transferencias a los depósitos en efectivo. (Fuente: Pexels)

Así mismo, guarda registro de todos tus depósitos y transferencia. Si tienes un ingreso extra ocasional en efectivo y quieres verlo reflejado en tu cuenta bancaria, procura declararlo ante el SAT.

También en el caso del pago de tarjetas de crédito es preferible realizar transferencias en lugar de depósitos en efectivo. Recuerda que el SAT también podría llamar tu atención si gastas más de lo que dices ganar.