Un comerciante que estaba siendo asaltado, sacó un arma y la accionó en contra de al menos dos delincuentes.
De los dos presuntos criminales, uno resultó muerto y el otro logró escapar a bordo de un automóvil marca Peugeot que había estacionado frente al negocio.
Los hechos ocurrieron el pasado 1 de diciembre en la localidad bonaerense de Wilde, en Avellaneda, alrededor de las 9 de la noche.
Un video grabado por una cámara de seguridad detecta el momento en que dos delincuentes entran al negocio junto a otros clientes.
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Luego comienzan a meter mercancía robada en sus mochilas, acción que el dueño del negocio detecta inmediatamente.
Como represalia, el comerciante saca un arma de fuego y dispara en contra de los delincuentes, hiriendo de muerte a uno y lastimando a otro que logró huir.
Medios locales indican que el dueño del negocio usó una pistola marca Taurus que dispara proyectiles de 9 milímetros, calibre suficiente para derribar un objetivo a corta distancia.
Debido a que el arma es propiedad legítima de su dueño, las autoridades no lo procesarán por su posesión, sino por haberla usado en contra de los delincuentes.
Fuentes policiales indicaron que el auto en el que huyó el criminal, fue abandonado kilómetros más adelante.
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En su interior se encontró una mochila que contenía un revólver calibre .22 con al menos tres proyectiles útiles.
Por su parte, el criminal que quedó tirado en la entrada del comercio, fue identificado por la Policía como Joaquín Cáceres, de 30 años de edad, luego de haber sido abandonado en la puerta de un hospital cercano con tres heridas de bala (dos en el abdomen y una en el brazo derecho).
Cáceres murió a los pocos minutos de que los paramédicos lo ingresaran al hospital.
La Policía aún sigue tras la pista del delincuente que logró escapar con parte del botín.
