Desde hace décadas las mujeres han buscado el reconocimiento de sus funciones y contribuciones en la promoción del desarrollo agrícola y rural. Este reconocimiento lo han encontrado en Yucatán, un estado que ha invertido apoyos e insumos para ellas.
El rol de las mujeres en el campo mexicano poco a poco ha dejado de ser invisible. De acuerdo con datos de SAGARPA, de 25 millones de personas que viven en el campo, cerca de 12 millones son mujeres que se dedican a la agricultura.
Desde el 2013, el gobierno del estado fortaleció la capacitación para mejorar la técnica artesanal y las estrategias de comercialización de los productos que elabora la población femenil del medio rural.
Desde que comenzó la presente administración, se han beneficiado a 921 artesanas mayas de los municipios de Cacalchén, Cuzamá, Chikindzonot, Chocholá, Dzidzantún, Hunucmá, Kopomá, Mayapán, Samahil, Tahmek, Teabo, Tekit, Telchac Pueblo, Tepakán, Ticul, Tixcacalcupul, Teya y Espita, así como 108 familias de migrantes de esta localidad.
La continuidad del apoyo se ha visto reflejado cada año. En el 2017 se puso en marcha la distribución de más de 244 mil equipos, herramientas e insumos por 112 millones de pesos, para impulsar a las mujeres dedicadas a la ganaderia, pesca y agricultura.
Gracias al apoyo del gobierno en los últimos cuatro años las mujeres han ganado terreno en Yucatán. De las 417, 002 mujeres que trabajan en el estado, 204,635 lo hacen en el sector informal de la economía, donde representan el 48% del total.
De acuerdo con el más reciente informe del Inegi, en tres años la fuerza laboral de la mujer creció en 25,272 personas, para llegar a 123,214 puestos, igual al 50% de la oferta total de fuentes de empleo.
