En Texas, Estados Unidos, un hombre que realizaba activismo en contra del uso del cubrebocas durante la pandemia murió de COVID-19 el sábado 28 de agosto, tras un mes de haber sido hospitalizado.
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Caleb Wallace de 30 años de edad tenía tres hijas y su esposa, Jessica, está embarazada del cuarto.
Jessica dio la noticia de la muerte de Caleb en un página de GoFundMe donde publicaba actualizaciones del estado de salud de su pareja. “Caleb murió en paz”, escribió. “Él vivirá por siempre en nuestros corazones y nuestras mentes”.
“The science is out there, and it’s saying this is perfectly fine to live with.” -Caleb Wallace, who left behind a wife and 3 children when he died of covid late last week pic.twitter.com/TmgKuJtQ1W
— 🥀_ Imposter_🥀 (@Imposter_Edits) August 29, 2021
La mujer detalló a medios locales que Caleb había presentado síntomas de COVID-19 desde el 26 de julio pero él se rehusó a ir a un hospital, y en su lugar, tomó zinc, vitamina C e ivermectina.
Finalmente fue llevado de urgencia al hospital el 30 de julio. Perdió la consciencia el 8 agosto, fecha desde la que necesitó asistencia de un respirador.
En contra de las medidas sanitarias “en nombre de la libertad”
El 4 de julio de 2020, Caleb Wallace organizó un evento que llamó “rally de la libertad” en San Angelo. La gente cargaba pancartas con mensajes que criticaban el uso del cubrebocas, el cierre de negocios y la ciencia médica difundida por los “medios liberales”.
Texas man who led anti-mask protests in name of ‘freedom’ dies of Covid-19 https://t.co/XHWMniIsx1 pic.twitter.com/uyvknWoZ39
— Jeffrey J Davis (@JeffreyJDavis) August 30, 2021
Además organizó un grupo llamado San Angelo Freedom Defenders (“Defensores de la libertad de San Angelo”). Decían no estar felices con “el estado actual de Estados Unidos“.
En abril de 2021, exigió al distrito escolar de la región retirar los protocolos con motivo de la pandemia.
Tras su muerte, su esposa publicó en internet que Caleb “fue un hombre imperfecto pero que amaba a su familia y a sus hijas más que a nada en el mundo”.
“A aquellos que le desearon la muerte, siento mucho que su perspectiva y sus opiniones los hayan lastimado. Yo rezaba porque él saliera de esto con una nueve perspectiva y con mayor aprecio por la vida. No puedo decir mucho más que eso porque no puedo hablar por él”, escribió la esposa del fallecido.
