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Los 25 mejores discos de 2019

Los mejores discos del año 2019: la lista con la música de este año que tienes que escuchar.

¿Qué nos dejó el 2019 en cuanto a música? A continuación te decimos los discos que tienes del año que tienes que escuchar.

Consulta aquí el Anuario 2019 de Noticieros Televisa

25. Feel Special – Twice

La evolución del K-pop y de Twice, en especial, son la muestra de cómo los paradigmas de una industria se encuentran para hacer evolucionar la música.

24. Visums – Self Sabotage

El álbum debut de este duo mexicano es todo lo que puede entenderse con la palabra “sincretismo”. Existe una combinación exhaustiva de géneros, estilos y estructuras musicales que dan como resultado algo totalmente innovador.

23. Yin Yang – Gianluca

El trap es, sin duda alguna, el género del 2019. Aunque se haya atorado en la monotonía y lo formuláico, el álbum del cantante chileno tiene una combinación entre pop, trap y funk que lo hace destacar y vislumbrar las posibilidades de este nuevo género masivo.

22. When We Fall Asleep Where Do We Go? – Billie Eilish

Billie Eilish ya no es solamente una promesa, es realmente la estrella de este año. Con menos de un año de carrera, su álbum debut mostró una nueva cara y un nuevo camino para explorar la música popular.

21. This Land – Gary Clark Jr.

El blues puede adaptarse fuera de los cánones tradiciones y estrictos que marca el Delta del Mississippi. This Land es al mismo tiempo una crítica al racismo moderno como una remembranza de que todo lo antiguo, ya sea el racismo o la resistencia, sigue vivo.

20. Miss Universe – Nilüfer Yanya

El rock hecho por mujeres es la nueva revolución. El debut de la compositora británica es un manual de cómo el rock es, al mismo tiempo, política y arte. En este álbum Nilufer despliega un talento increíble en producción y composición.

19. Oasis – J Balvin, Bad Bunny

En muchos años, cuando se quiera voltear a ver cómo fue la evolución del reggaetón, este álbum será la forma de entenderlo. Así como el Fausto de Goethe es la recapitulación de toda la literatura romántica, Oasis es la recapitulación de todo el reggaetón.

18. Dogrel – Fontaines D. C.

Incluso pareciera que es la voz de Ian Curtis cantando detrás de este símil joydivinezco, pero es mucho más que eso. Es un retrato crudo y furioso de la juventud que, como siempre, necesita espacios para alzar su propia voz.

17. Good at Falling – The Japanese House

Amber Bain concretó años de EP’s y sencillos en este debut que le canta a su propia facilidad para fallar. Es un libro abierto de sus sentimientos y de su forma de enfrentar la vida y las decepciones en las que ella misma se mete; todo con un estilo único y que, hasta el momento, nadie ha sabido replicar.

16. Zapandú – Valgur

Los fantasmas de la guerra contra el narco también se cantan y se sienten en la memoria sonora del país. Esta banda oaxaqueña narra, tras cortinas de bajos y sintetizadores funk, el horror de las fosas comunes, las desapariciones y los asesinatos de una guerra inútil.

15. Dedicated – Carly Rae Jepsen

Aunque no tiene el encanto ni la capacidad de trascendencia que Emotion (2015), Dedicated es una forma consistente de ver a Carly Rae Jepsen como la compositora pop más destacada de este siglo.

14. The Quanta Series – Káryyn

Este álbum se dedica a buscar las formas en que el terror de la migración forzada provoca. La productora, compositora y música armenia logra generar una atmósfera caótica y dolorosa en la que distinguen perfectamente los cambios de un ser concreto a una sombra que transita sin poder encontrar un hogar.

13. Plastic Anniversary – Matmos

Matmos nos tiene acostumbrados a la experimentación. Para este nuevo álbum decidieron hacer todo con productos hechos de plástico, como una crítica a lo desechable y a la irremediable cantidad de basura que hay en el mundo.

12. Charlie – Charlie XCX

Charlie XCX prometió que este sería el álbum más grande de su carrera… y cumplió. Es una perfecta amalgama entre la música dedicada a recalcar el ámbito digital y sus posibilidades con la música orgánica que ahora entendemos como nostalgia, o en otras palabras: así suena el futuro.

11. Ghosteen – Nick Cave And The Bad Seeds

Después del dolor por la pérdida de su hijo, reflejado en en Skeleton Tree, Nick Cave ahora busca mostrar lo difícil que es vivir el duelo y cómo se vive el proceso de perder a un hijo, siendo que todo padre espera ser enterrado por estos, no al revés.

10. Titanic Rising – Weyes Blood

La oda melancólica e inmersiva de Natialie Mering es su trabajo más complejo y completo. Como indica su nombre, este álbum va del fondo del hundimiento hasta la superficie, donde no hay nada salvo posibilidades de hundirse nuevamente.

9. GREY Area – Little Simz

Hablar de la adolescencia está encasillado en los aburridos y monotemáticos actos de punk rock, pero Little Simz entendió su propia forma de enfrentar la juventud en un álbum que recupera elementos del G Rap con sampleos de televisión para emprender un viaje temporal.

8. Ginger – Brockhampton

Después de un accidentado Iridescence, la mejor boyband desde One Direction lanzó Ginger, un trabajo que se centra más en los conflictos de la banda con su anterior integrante Ameer Vann y en su resurgimiento como banda, además de no dejar de tocar temas tan cruciales para el hip hop como el racismo, y para la generación millennial, como la salud mental.

7. YU – Rosie Lowe

El segundo álbum de Rosie Lowe conjunta todo lo que hace bien y pule todas las falencias que tuvo en su debut. YU es un viaje introspectivo para derrocar al ser que habita dentro de uno mismo mediante preguntas y líricas alegóricas, rememorando a grandes seres de la historia como si todos fueran Ozymandias: la magnificencia reducida a cenizas.

6. Norman Fucking Rockwell! – Lana del Rey

Después de muchos intentos fallidos, cínicos y desmesurados de abordar el americana, Lana Del Rey por fin consiguió llegar al costumbrismo sin parecer una whitetrash redneck de los estados del sur. En NFR!, la cantante demuestra también que no es unidimensional y tiene capacidades y posibilidades fuera de la forma más flácida de cantar y aproximarse a la música.

5. MAGDALENE – FKA Twigs

El regreso de FKA Twigs tiene la misma calidad musical y lírica que maneja desde su debut. Sin embargo, en este lo personal lo convierte en posibilidades generales para cualquier escucha. En esta ocasión, decidió jugar más con las capacidades de sus letras para acoplarse a su música y hacer de cada canción una declaración personal de existencia.

4. All Mirrors – Angel Olsen

La consumación de la carrera de Angel Olsen está aquí: un trabajo repleto de texturas que atienden mucho más el lado emotivo que al lado furioso de Angel, en una mezcla que se repite a sí misma dejando de lado las guitarras poderosas y apostando por la instrumentación de cuerdas y arreglos de música de cámara para ayudar a construir un mensaje en capas.

3. LEGACY! LEGACY! – Jamila Woods

Cuando al abuso le pones nombre lo haces más cercano y eso fue lo que hizo Jamila Woods. Además, no trata cualquier racismo, sino el que se viste de misoginia, machismo y violencia perpetuada dentro y fuera del espectro racista. Que este álbum sea tan pertinente y actual es una muestra de que la música de la comunidad negra aún tiene que resistir.

2. Kiwanuka – Michael Kiwanuka

En el mismo tenor que Jamila Woods y Gary Clark Jr., Michael Kiwanuka sigue buscando narrar lo complejo que es vivir en este mundo de blancos siendo negro. Asimismo, este álbum se presenta como un producto repleto de elementos pop que lo hacen fácil de escuchar pero dentro tiene la profundidad que también encontramos en Love & Hate, su producción pasada. Michael Kiwanuka entiende las tragedias como propias y ya sea cuestión de nacimiento o del ser formado, siempre están en canciones que se extienden en la trascendencia temporal.

1. Caligula – Lingua Ignota

El trabajo que entregó Kristin Hayter es una de las más impresionantes que se hayan visto en mucho tiempo. Más allá de intentar ser un álbum conceptual, tomando como eje la historia de supervivencia tras violencia doméstica, es un verdadero transbordador que nos lleva exactamente a las vivencias de Kristin dentro de esa relación que estuvo por arrebatarle la vida.

Las formas en que Kristin aborda esto no es solamente desde el ámbito personal y la anécdota, sino que busca las raíces del problemas y las ataca, cuestionando la misoginia en sus raíces políticas y religiosas, entendiendo también a mujeres que han sido revictimizadas por defenderse de sus abusadores.

No hay un trabajo que capture más la esencia de su temática y de su intención estética en 2019 que pueda superar la catarsis caótica de CALIGULA.

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