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Un Mandela Palestino: el hombre que puede lograr la paz con Israel

En el conflicto entre Israel y Palestina, el prisionero político Marwan Barghouti ha surgido como el Nelson Mandela palestino

A mediados de abril dio inicio una huelga de hambre en la que participan alrededor de mil prisioneros palestinos. Entre los hombres que están a la cabeza de esta manifestación se encuentra Marwan Barghouti, figura política que ha sido nombrada por sus seguidores como “el Mandela palestino”.

Barghouti lleva 15 años cumpliendo una pena de cadena perpetua en la prisión de Hadarim; sin embargo, este sujeto tan polémico ha logrado mantenerse como una voz relevante en el activismo político alrededor del perenne conflicto israelí-palestino.

Su más reciente movimiento es la huelga de hambre que él mismo anunció en una columna editorial para el New York Times, denunciando las miserables condiciones de vida que él y otros presos políticos deben soportar.

La huelga de hambre es la forma de resistencia más pacífica disponible. Inflige dolor únicamente a quienes participan y a sus seres queridos, con la esperanza de que sus estómagos vacíos y su sacrificio ayuden a que el mensaje resuene más allá de los confines de sus células oscuras.

(Foto: AP Photo/ Nasser Shiyoukhi)

¿QUIÉN ES MARWAN BARGHOUTI?

Marwan Barghouti, de 57 años de edad, ha sido acusado por Israel y sus aliados de ser el líder de Tanzim, el brazo armado del partido político palestino, Fatah. También ha sido señalado de ser uno de los cabecillas que prendió la mecha de la segunda Intifida (2000-2005), por lo que se la han imputado crímenes como asesinato y conspiración para cometer actos de terrorismo.

No obstante su arresto a manos de las Fuerzas de Defensa de Israel en 2002, la popularidad de Barghouti lo mantuvo entre los favoritos a asumir la presidencia de la Autoridad Palestina tras la muerte de Yasser Arafat en 2004. Sin embargo, tuvo que acceder a la presión de sus compañeros de Fatah y abandonar su campaña con tal de apoyar la candidatura de Mahmud Abás. Ante tal desilución, Barghouti fundó su propio partido desde prisión, al-Mustaqbal.

A pesar de las acusaciones en su contra, Barghouti sostiene su postura a favor de la paz entre israelíes y palestinos. También apoya la creación de dos Estados y está dispuesto a reconocer el derecho de Israel a existir. Varios líderes alrededor del mundo han presionado al gobierno de Benjamín Netanyahu con el fin de otorgarle la libertad a Barghouti, incluyendo Ahmed Kathrada, un ex-prisionero político durante el régimen del apartheid en Sudáfrica.

De hecho, son varios los paralelismos que han surgido entre la lucha de Barghouti y la historia de Nelson Mandela. El líder sudafricano fue encarcelado por el gobierno del Apartheid durante 27 años, acusado de pertenecer a una organización terrorista.

Nelson Mandela nunca abandonó sus principios, así como Barghouti, el primer miembro del parlamento palestino en ser confinado en territorio israelí. Un documental sobre la vida de Barghouti, así como la nominación al premio Nobel de la Paz, permiten que su lucha no pierda su brillo en el radar internacional.

(Foto: AP Photo/Nasser Nasser)

BARGHOUTI NUNCA ESTARÁ SOLO

Entre aquellas personas que promueven con entusiasmo la postura de Barghouti fuera de prisión está su propia familia. Su esposa Fadwa es miembro del Consejo Revolucionario del movimiento al Fatah, y actualmente está de vuelta en las pantallas para discutir el caso del dirigente palestino con la prensa. Hoy Fadwa se encuentra preocupada porque no ha vuelto a saber de su marido desde que éste fue aislado de los demás prisioneros tras el comienzo de la huelga de hambre.

El fuerte activismo de Fadwa y sus hijos han logrado que la población palestina -principalmente en Ramala, su lugar de residencia- se una en solidaridad con la manifestación de los prisioneros políticos.

Foto: David Silverman/Getty Images

¿TE ATREVES A TOMAR EL #SALTWATERCHALLENGE?

Por su parte, Aarab Marwan Barghouti -el hijo de Marwan- explora otras vías para apoyar a su padre. A finales de abril vio su oportunidad a través de las redes sociales, y siguiendo el ejemplo de un fenómeno viral como lo fue el el Ice Bucket Challenge, Aarab lanzó su propio reto, con todo y hashtag: se trata del #SaltWaterChallenge.

¿Por qué agua salada? Porque el agua salada es lo único que los prisioneros palestinos se han permitido consumir durante la huelga. En la opinión de Aarab, su padre “es un terrorista, igual que Nelson Mandela”, y por lo tanto, la mejor esperanza que tienen los israelíes de hallar una solución pacífica a este conflicto.

https://www.youtube.com/watch?v=Tc2YtS_qryM

LA RESPUESTA DE ISRAEL

La propaganda del régimen de Netanyahu es el obstáculo más grande de todos, según Aarab. La derecha israelí tiene bien tachado a Barghouti como terrorista, e incluso ve la huelga como una oportunidad para deshacerse del polémico dirigente y otros prisioneros incómodos. “Déjenlos morir” es la opinión de varios simpatizantes y habitantes de los asentamientos israelíes en Cisjordania.

Por si fuera poco, las autoridades penitenciaras han filtrado videos en los que un hombre -supuestamente Barghouti- está consumiendo algún alimento, buscando así desprestigiar la huelga de hambre.

Pero no pasó mucho tiempo para que los seguidores de Barghouti cuestionaran la veracidad de estos videos.

No hay duda de que Barghouti es uno de los prisioneros políticos más valiosos bajo el yugo del régimen israelí. Y resulta evidente el nivel de autosabotaje al mantener encerrado a uno de los hombres más influyentes en Palestina que abogan por la paz.

Tanto el partido Fatah de Mahmud Abás como las fuerzas de Hamas carecen de credibilidad entre la población palestina. Si Israel conserva algún interés por volver a entablar diálogos de paz con sus vecinos, lo mejor que puede hacer es negociar con las fuerzas políticas que arropan los intereses de todos los involucrados, en lugar de encerrarlos de por vida.

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