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El Super Bowl, una oportunidad para que Los Ángeles Rams encuentren su hogar

Los Rams de Los Ángeles están ante la oportunidad, en el Super Bowl, LVI de adueñarse de la ciudad.

Los Ángeles es una ciudad de éxitos deportivos. Los Dodgers, en el beisbol de las Grandes Ligas, y los Lakers, en el basquetbol de la NBA. Incluso ha alcanzado la gloria en el hockey de la mano de los Kings. Sin embargo, cuando hablamos de la NFL, la historia es otra. Y los Rams esperan por fin ser el equipo que se adueñe de Los Ángeles de una vez por todas. Y esa oportunidad se las brindará el Super Bowl LVI.

De Cleveland hacia Los Ángeles

Los Rams nacieron, aunque cueste creerlo, en el ya lejano 1936, en Cleveland. En 1937 se unieron a la American Football League (AFL), la antecesora de la NFL.

En su última temporada en Ohio, los Rams ganaron su primer título como equipo profesional, tras derrotar a Washington en el partido por el campeonato.

Los Rams de Cleveland | Foto: Wikimedia Commons

Sin embargo el dueño, Dan Reeves, vio en Los Ángeles la oportunidad de jugar en el Memorial Coliseum. Un magno estadio con más de cien mil butacas. Y así se convirtieron en el primer equipo de deporte profesional el jugar en la popular ciudad de California.

Por algunos años, fueron el único equipo en la ciudad. Y tuvieron éxitos deportivos que pudieron haberlos convertido en el equipo consentido y tradicional de los aficionados, pero eso no ocurrió.

A inicios de la década de los 60, otros equipos profesionales se mudaron a Los Ángeles: los Dodgers y los Serafines de la MLBlos Lakers de la NBA y Los Cargadores de la extinta AFL, también de fútbol americano. Y si bien los Rams lograron un campeonato en 1951 y tuvieron temporadas exitosas, no logran ser el equipo ganador de la ciudad, algo que sí pasó con los Dodgers o los Lakers.

Siempre a la sombra

Los fans de San Francisco suelen ser mayoría en la casa de los Rams | Foto: Getty Images

A pesar de haber llegado al Super Bowl en 1979 (que a la postre perdieron contra los Steelers), los Rams competían en una ciudad de equipos que eran constantemente campeones, populares y exitosos. En los 80, aficionados de los Dodgers abrazaron la Fernandomanía, mientras que los seguidores de los Lakers vieron cómo su equipo era apodado el Show Time y no se hartaba de ganar títulos.

Por si fuera poco, los dueños de los Rams decidieron dejar Los Ángeles para mudarse a Anaheim. El equipo cambió sus partidos de local al Anaheim Stadium, desarraigando al equipo y dejando un vacío que fue no tardó en ser llenado por los Raiders. Tras dejar Oakland en 1982, los Malosos apenas tardaron un año en enamorar la ciudad, cuando en 1983 ganaron el Super Bowl.

Además, otra escuadra se convirtió en el gigante de todo el estado de California: Los 49ers de San Francisco. Uno de los grandes rivales divisionales de los Rams,  ganaron cuatro títulos de Super Bowl en la década de los 80 de la mano de uno de los mejores jugadores de la historia de la NFL: Joe Montana.

La popularidad de los Rams fue decayendo más y más. A pesar de regresar a Los Ángeles en 1982 y contender en la postemporada, los otros equipos atraían mucho más atención.

A todo lo anterior se suma que, al llegar la década de los 90, trajeron consigo temporadas perdedoras que hicieron que los dueños tomarán una decisión: el golpe más duro a los fieles de los Rams.

La mudanza a Saint Louis y el único anillo

Más allá de las dificultades deportivas, la relación entre los Rams y sus fans se volvió insostenible para los dueños. El estadio de Anaheim no se llenaba y los señalamientos dieron como resultado la decisión que acabó con la lealtad de los aficionados: mudar el equipo a Saint Louis, en Missouri, a más de 19 mil kilómetros de distancia de Los Ángeles.

En 1995, y a pesar de la oposición inicial de la NFL, los Rams se mudaron a Saint Louis. Los Ángeles se convirtió en un recuerdo. También cambiaron el tradicional amarillo y azul de su uniforme por el dorado y azul marino. Un nuevo comienzo… que pronto dio resultados.

Las estrellas se alinearon y los Rams encontraron en Kurt Warner al mariscal de campo ideal para llevarlos al título de Super Bowl (XXXIV) que nunca pudieron ganar en Los Ángeles. Parecía que la mudanza era lo que les había hecho falta para volver a ser relevantes, trascendentes.

Kurt Warner enamoró a Saint Louis con su brazo y sus logros con los Rams | Foto: Getty Images

Su espectacular ofensiva fue bastante prolífica e incluso se quedaron muy cerca de ganar otro anillo, de no ser por Tom Brady y sus Patriots. Parecía que su disfuncionalidad había terminado y que Saint Louis sería finalmente el hogar que no habían tenido en Los Ángeles.

Pero de nuevo el amorío no duró.

Los Rams buscaban tener un estadio nuevo, que sintieran propio. Eso fue lo que los alienó de Los Ángeles. Y es lo que terminaría alejándolos de Missouri.

No llegaron a un acuerdo para la construcción del nuevo estadio con el gobierno local. Los fans que habían logrado ganar en Saint Louis se sintieron traicionados cuando, en 2016, los Rams regresaron a Los Ángeles. Una vez más, rompían el corazón de sus fieles por la ambición millonaria de sus dueños.

Regreso a Los Ángeles: el Super Bowl como deuda pendiente

Matthew Stafford espera darle una alegría a los fans de los Rams | Foto: Getty Images

Recuperar a los fans de Los Ángeles no ha sido sencillo para los Rams. A pesar de que juegan en un estadio nuevo, el SoFi Stadium, mismo que albergará el Super Bowl LVI, se han visto forzados a compartirlo con los Chargers y, ver cómo se llena de camisetas rojas cuando juega de local San Francisco.

Estuvieron cerca de coronarse en 2019, pero, de nuevo, Tom Brady apareció en escena para dejarlos con la miel en los labios.

Tal vez la única manera que tengan los Rams de por fin conquistar a su maltrecha afición en Los Ángeles sea ganando, no solo uno, sino varios anillos de campeón. Y para empezar, el domingo 13 de febrero tendrán la oportunidad de sanar un poco las heridas que su inestabilidad ha causado en una afición que nunca mereció el abandono de una de las franquicias más añejas de la NFL.

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