Geografía hace de Chicago un centro distribución de drogas

CHICAGO, Estados Unidos, oct. 16, 2013.- La ubicación geográfica y la red de transportes han convertido a Chicago en el centro de distribución de drogas del cartel mexicano de Sinaloa, según un artículo de la revista “Chicago”.

Su autor, Jason McGahan, se pregunta por qué un cartel tan poderoso se molestaría en convertir a una ciudad que se encuentra a 1,500 millas de México en su centro de distribución norteamericano.

La respuesta es “su ubicación geográfica”, a menos de un día de manejo del 70 por ciento de la población del país, con seis autopistas interestatales que cruzan la región y conectan al este con el oeste. Solamente dos estados (Texas y California) tienen más millas de carreteras interestatales que Illinois, señala.

Y en materia de transporte por tren, en Chicago operan seis de las siete principales líneas de ferrocarril de Estados Unidos.

Esta ciudad posee además uno de los mayores centros de manejo de carga del país y el tercero de contenedores en el mundo, después de Singapur y Hong Kong (China).

Asimismo, el artículo destaca la actividad de los aeropuertos Midway y O’Hare, con más de 86 millones de pasajeros y 1,5 millones de toneladas de carga registrados en 2011.

Otro aspecto que según el artículo favorece esta decisión de los carteles en Chicago es el 80 por ciento de población de origen mexicana en barrios como La Villita y Pilsen, que serían el eje de la distribución de drogas en la ciudad.

A poca distancia al oeste del barrio mexicano La Villita se encuentra la ciudad de Cícero, donde en su momento supo reinar el mafioso Al Capone usando como base de operaciones el hotel Hawthorne, agrega.

En febrero de este año el mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, líder del Cartel de Sinaloa, se convirtió en el nuevo “enemigo público número 1” de Chicago, desplazando a Capone que ocupaba ese puesto desde 1930.

En aquella oportunidad, el director de la Oficina Federal Antidrogas de los Estados Unidos (DEA) en esta ciudad, Jack Riley, declaró que Guzmán Loera, actualmente prófugo de la justicia y supuestamente refugiado en una remota área rural de la Sierra Madre en México, es el principal abastecedor de las drogas que se venden en Chicago, o se distribuyen desde aquí al resto del país.

En Chicago, el cartel tiene socios entre los 100.000 pandilleros que se calcula existen en la ciudad y suburbios y está tan incrustado que las autoridades policiales, locales y federales son obligadas a operar como si estuvieran en la frontera con México, aseguró.