CRIMEN Y SEGURIDAD

Policías de Veracruz desaparecían a civiles y policías, después los lanzaban a barrancas

En ‘Despierta’ le presentamos la segunda parte de las desapariciones forzadas en Veracruz. Detrás había una red de policías estatales coordinada. Detenían, torturaban y desaparecían a ciudadanos y autoridades. Son casos que ocurrieron durante el gobierno de Javier Duarte, hoy preso.

En un lugar conocido como las barrancas de La Aurora, en Xalapa, Veracruz, arrojaban a personas que habían sido detenidas y torturadas por la Policía Estatal y que desde entonces están en calidad de desaparecidas, según declaró ante el Ministerio Público un testigo protegido. ‘Despierta’ obtuvo parte de la declaración ministerial de dicho testigo, que narró a la Fiscalía:

En la Academia de Policía tenían por días a los detenidos en lo que les sacaban información sobre las personas que se dedicaban a vender droga”.

Los ‘fieles’ (en referencia al grupo élite de la corporación) se los llevaban y tiraban cerca de un lugar que bautizaron como ‘La Laguna Negra’, que está casi enfrente de la Academia. A ese proceder le llamaban dar ‘La Olímpica’, dijo el testigo.

Recuerdo que llegó el comandante Roberto González Meza y le dijo a unos compañeros que estaban corriendo conmigo que se fueran a llevar a unos detenidos a ‘La Olímpica’, para que fueran a nadar en ‘La Laguna Negra’; por lo que pregunté al miembro de los ‘fieles’ con clave ‘Open’, a qué se refería, respondiéndome, que era llevarlos a la barranca de La Aurora”.

De acuerdo con testimonios asentados en declaraciones, dos grupos de la Policía del Estado, conocidos como los ‘fieles’ y Fuerza de Reacción, lo mismo desaparecían a ciudadanos que a otros policías y ministerios públicos.

La Fiscalía de Veracruz tiene 124 expedientes que registran 202 desapariciones forzadas, de junio de 2011 a agosto de 2016, cuando Arturo Bermúdez Zurita era secretario de Seguridad Pública del gobernador Javier Duarte. 31 policías han sido detenidos de 2017 a la fecha, doce más acusados en la reciente operación “Tiro de gracia” están prófugos.

Alcancé a ver cuando sacaron a mi hijo y lo aventaron a la camioneta”.

Angélica Mendoza, madre de Jonathan Isaac Mendoza, atestiguó cuando la Policía se llevó en una patrulla a su hijo, en diciembre de 2013. Describe que ese día había un operativo policiaco en la colonia Formando Hogar del puerto de Veracruz, donde vive, y que eran varias patrullas y tres vehículos sin logotipos oficiales los que se llevaron a su hijo y otras personas de la colonia.

Era el mismo método que implementaban en Xalapa los policías detenidos el pasado 8 de febrero.

Angélica Mendoza, madre de Jonathan Isaac Mendoza, desaparecido en Veracruz, dice:

Ya que pasó eso me anduve movilizando. Al otro día fui a robo a comercio, en Boca del Río, ahí vi las camionetas y vi la patrulla, la que llegó a mi casa. Le dije a un oficial ‘por favor déjeme ver si trajeron a mi hijo aquí, aquí están los carros que llegaron a mi casa y sacaron a mi hijo’. Deme el nombre, ¿tiene tatuaje? dice. Sí, le digo. Me dice, ah ok, deme el número, pero nunca me hablaron”.

El caso de Jonathan y 5 jóvenes más que la Policía del Estado se llevó de la colonia Formando Hogar en el puerto de Veracruz, en diciembre de 2013, llegó al Comité contra la Desaparición Forzada de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Perla Damián, madre de un desaparecido en Veracruz, señala: “En 2015 nos dieron respuesta. Para el siguiente curso de los otros meses ya estaban emitiendo acciones urgentes”.

Estamos en 2018, de esas recomendaciones que emitió la ONU, ¿algo se ha cumplido?

“No han hecho nada. Han hecho omisión de todas las recomendaciones de la ONU, ahorita con la detención que hubo de policías, no, nada más son ellos”.

La desaparición forzada también victimizó a autoridades. Rosario Sayago, esposa de un policía desaparecido en Cardel, Veracruz, explica:

Son ocho policías desaparecidos, somos una vivencia de que policías desaparecen a policías”.

Griselda Barradas Huesca, madre de un ministerio público desaparecido en Veracruz, dice: “Mi hijo Pedro Alberto Huesca venía de Cardel hacia su trabajo, aquí en Veracruz. Trabajaba como funcionario público, ministerio público de la Procuraduría. Ellos saben que se lo llevaron dos comandantes de ahí de Cardel, dos comandantes de la Policía Estatal”.

En esa fecha, el jefe de la Policía Estatal en Cardel era Marcos Conde Hernández, quien fue trasladado a Tierra Blanca, en donde fue detenido en enero de 2016 por la desaparición de cinco jóvenes en ese municipio. Por este caso, ocho policías fueron detenidos.

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Con información de Luis Pavón

MLV